"Los Rosales" es el primer centro de adiestramiento de canes en la capital oscense
Amante de los animales pero sobre todo de los perros, José Luis López Franco comenzó haciendo sus primeros pinitos en el huerto de su padre. Allí guardaba jaulas con perros que él mismo recogía de la calle.
HUESCA.- Así, de su afición a los perros y observando la carencia
de un servicio de guardería y adiestramiento para la raza canina en Huesca
decidió construir hace 15 años un magnífico centro llamado "Los
Rosales", situado en la periferia de la capital. Años más tarde, debido
a la insistencia de algunos compañeros y clientes, apostó por un club
de hípica y construyó una residencia felina dentro del cortijo. Conseguir
los permisos para poder legalizar el terreno le resultó algo difícil,
ya que algunos veían imposible que tres especies distintas de animales convivieran
en un mismo lugar. A pesar de todas las dificultades, "Los Rosales" se ha
convertido en el primer centro de la capital oscense dedicado al adiestramiento
de perros.
La finca dispone de un total de 140 jaulas y allí acuden perros de todas las
edades, tamaños y razas. Unos están fijos todo el año, otros sólo
en periodos vacacionales. "Este año, la crisis se ha dejado notar y no
hay tantos animales como en años anteriores", explicó el dueño
de la finca. "Cuando más se suele llenar son los fines de semana y el mes
de agosto, sobre todo la semana de San Lorenzo", añadió. Dependiendo
el tipo de alojamiento las tarifas varían: 10 euros por día para aquellos
que alojan al perro en periodo vacacional, 65 y 105 euros al mes para los perros
sin comida y con comida respectivamente y que están fijos todo el año.
Además de estas acomodaciones, José Luis López dispone de un campo
de adiestamiento "completo", con todos los utensilios necesarios para garantizar
el buen entrenamiento del perro. Para ello, cuentan con la presencia de Víctor
Barco, un zaragozano que desde su infancia y siguiendo los pasos de su padre, José
Ignacio Barco, se ha dedicado al trato con la raza canina. "Mi padre abrió
la escuela en el 1980 y yo tenía cuatro años. El primer perro que presenté
a un concurso de belleza yo tenía once años. La primera vez que hice de
figurante yo tenía 14 años y la primera vez que acudí aun campeonato
tenía 17, así que llevo toda la vida con el tema canino", explicó
el educador.
"Paciencia, imaginación y respeto al animal" son las tres máximas
más importantes para que un perro sea obediente y se lleve bien con el dueño.
Él las tiene muy presentes en sus clases y hasta el momento está satisfecho
con los resultados. "Anteriormente, era la presión la base del adiestramiento
y el porcentaje de agresividad era más alto. Ahora, hay que tener en cuenta
la motivación en el animal", argumentó.
Para llevar a cabo las clases, Víctor no necesita demasiados materiales. "Una
buena correa, un collar y un buen paquete de salchichas" son los tres elementos
básicos para que el perro se comporte. Esto ayudará a reducir los peligros
que enfrentan al maestro con animal a pesar de que éstos son pocos y él
no lo tiene en cuenta a la hora de enseñar. "Si el perro ve que vamos muy
protegidos nos puede morder y todavía será peor", comentó.
La relación entre el perro y las personas "es cien por cien" cuando
salen de sus clases. "Tu puedes tener el mejor perro, el más tranquilo
o el más nervioso, el más agresivo o el más pancho. Todo lo que haga
el dueño a partir del perro que tenga es lo que podemos ganar con el perro.
Es decir, si tenemos un perro tranquilo y queremos que juegue, a base de motivación
y paciencia, jugaremos", comentó. "Si tenemos un perro agresivo hay
que hacerle entender al dueño cómo es su perro, evitar ciertos problemas
que se pueden producir día a día como por ejemplo al pasear a las salida
del recreo de los niños con dicho perro", afirma el adiestrador".
En Europa, el tratamiento a los animales es diferente y la educación del perro
se da desde el principio. En países como Francia, Bélgica, Alemania y
Holanda, los dueños primero apuntan al perro a las clases de adiestramiento
y cuando lo tienen lo llevan a entrenar. "Por el contrario, en España no
estamos acostumbrados a este tipo de iniciativas y esta práctica se ve mal
ya que los españoles estamos peor preparados para ello. A los españoles
a día de hoy nos hace falta mucha cultura canina", dijo el adiestrador.
"Hay gente que no está preparada para tener perros, por eso los abandona",
añadió.
Las sesiones que se realizan en el centro son variadas. Van dirigidas a mejorar
las conductas, obediencias básicas, agility o trickdogging. Los entrenamientos
son dos días por semana y las clases duran entre una hora y media. Una vez
que se familiarizan con todas las actividades algunos perros los entrenan para presentarse
a concursos, tanto a nivel regional como nacional. Los meses de entrenamiento son
de tres a seis meses de duración y se presentan todas las razas de perros aunque
los más apropiados son los border collie y el pastor belga malinois, una raza
de perro que sirve para todo. "Para que un perro gane el concurso lo único
que necesita es motivación", explicó el entrenador. En Huesca antes
se hacían pero se perdió la tradición y ahora es en la feria de muestras
donde se hacen este tipo de concursos especializados. Sin duda, un mundo por descubrir
y que muchos desconocen e ignoran y que puede resultar muy interesante.
|