Los agentes de la Guardia Civil rescataron al infractor tras haberse caído a una acequia en estado de embriaguez
ZARAGOZA.- Agentes de la Guardia Civil denunciaron a un hombre de 57 años
al que habían auxiliado previamente tras caerse de la bicicleta en la que
se desplazaba en una acequia de un camino rural en Mallén, en la provincia
de Zaragoza, al constatar que se encontraba ebrio y que había burlado el
confinamiento del estado de alarma por coronavirus.
La Guardia Civil apuntó que la voz de alerta fue dada a través de una
llamada hecha al servicio de emergencias del 062 para comunicar de la presencia
de una persona accidentada en el referido camino rural.
Una vez en la zona, los agentes observaron una bicicleta tirada en el camino y pudieron
escuchar unos gemidos de dolor procedentes de una acequia cercana.
Tras su localización, pudieron verificar que el ciclista accidentado se hallaba
parcialmente cubierto de agua y barro, y con evidentes síntomas de embriaguez
e hipotermia, debido a las bajas temperaturas.
Los efectivos de la Guardia Civil procedieron a sacar al accidentado de la acequia
y a protegerlo con mantas térmicas, al tiempo que solicitaban una ambulancia
para que fuese trasladado a un centro hospitalario de Zaragoza.
Unos 20 minutos después de iniciarse dicho traslado, el personal sanitario
de la ambulancia solicitó la presencia de los agentes, ya que el accidentado
se había soltado del sistema de seguridad que le sujetaba a la camilla e intentaba
bajar del vehículo.
Los agentes, tras llegar al lugar donde se encontraba parada la ambulancia, verificaron
que el accidentado no presentaba muestra de dolor alguna o de limitaciones para
moverse, por lo que se procedió a la anulación del traslado.
Debido a la situación de vulnerabilidad de esta persona por el estado de embriaguez
que presentaba y su ubicación a varios kilómetros de su domicilio, procedieron
a trasladarlo hasta su vivienda para evitar riesgos derivados tanto para
su persona como para otros usuarios de la vía por la que tenía que regresar.
Una vez lo hubieron llevado a su domicilio, le interpusieron una denuncia administrativa
por incumplir las medidas de confinamiento establecidas en el decreto de declaración
del estado de alarma a causa del coronavirus.
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