Agustín Lasaosa reafirma su "confianza total en la justicia" y que "el Huesca siempre ha sido un ejemplo a seguir"
HUESCA.- El pasado jueves
se cumplió un año de la Operación Oikos, toda una pesadilla
para el Huesca y para quienes forman parte del sumario en su papel de investigados.
Entre ellos, el ex presidente del club, Agustín Lasaosa, que lamenta este
año difícil y complejo, que tuvo su inicio en la Oikos y su prolongación
en la pandemia del coronavirus. "¡Qué crueldad la que han soportado
y soportan miles de personas en la actualidad! ¡Con lo que nos han dado nuestros
mayores!", enfatiza Lasaosa, que apunta una vez más una mirada de añoranza
hacia su familia. "Debo de dar gracias a Dios y a nuestra virgen salesiana
por poder despedir a nuestros padres de la forma más sincera y cariñosa,
cogiéndoles la mano. Por la proximidad en el tiempo, a Luisa, nuestra madre".
Afirma que en estos momentos tiene "poco que decir" sobre el discurrir de
la Operación Oikos. Reafirma
su "confianza total en la justicia" y destaca que ha "conocido
a un transmisor de paz, José María Fuster, mi abogado. Voy de su mano
y a él le corresponde contestar a las preguntas jurídicas. El fútbol
me ha vuelto a premiar con la amistad de un gran hombre como José María.
El Huesca como club y yo como presidente en este proceso vamos de la mano y hemos
sido bajo mi presidencia un ejemplo a seguir, afirmado por todas las instituciones
españolas".
En su referencia a la Sociedad Deportiva Huesca, Lasaosa recuerda: "Mis padres
me transmitieron ese gen azulgrana. El equipo, hermanos, tíos... todos
del Huesca. Desde que dimití hace un año no he faltado a ningún partido
en El Alcoraz. También he viajado a algún lugar como aficionado. Sigo
teniendo mi butaca de socio. Ahora, como el resto de la afición, no podemos
hacerlo, pero nuestro corazón sí está con el equipo, dando fuerza
a todo el mundo".
No oculta, al hablar del futuro, que se retiró para luchar por defender
su inocencia y que le gustaría volver a la presidencia. "Es lo que
deseo. Dependerá de la opinion de mis compañeros de Consejo. Este Huesca
de los últimos quince años nos lo inventamos Jose (Petón) y yo, protegidos
por unos pocos locos más, nos decían. Ya se sabe que nací del Huesca
y pienso morir siendo del Huesca. Muy pocos lo pueden afirmar".
Pero, en el presente, su deseo es que "el Huesca cumpla sus objetivos y que
seamos felices. Que disfrutemos con nuestro equipo. Que la vida, de vez en cuando,
como canta Serrat, nos gasta una broma, como la última que estamos infelizmente
malviviendo. Salud para todos... que lo demás tiene arreglo".
|