El joven arquero riojano vuelve feliz de su estancia en la selección Sub-21 y destaca el buen "feeling" con Andrés
MIGUEL ÁNGEL BLASCO 16/10/2020
HUESCA.- Álvaro Fernández, en un ejercicio de madurez, ha afirmado
este viernes que afronta su suplencia en el Huesca “con calma, trabajo y paciencia”,
en la seguridad de que el trabajo que está haciendo dará sus frutos.
El joven cancerbero se mostraba “muy feliz” por haber conseguido con la selección
española Sub-21 la clasificación para la Eurocopa del próximo
mes de marzo en Hungría y Eslovenia con la victoria del pasado lunes ante Kazajistán
en un choque en el que Álvaro completó los 90 minutos. “Estoy feliz por
el partido que pude disputar, de los 90 minutos, que me vinieron muy bien para
coger otra vez sensaciones, y sobre todo por conseguir el objetivo que nos pusimos
el año pasado cuando empezamos con nuestra generación esta andadura.Era
primordial volver a clasificarnos, somos los vigentes campeones de la generación
pasada y tenemos la responsabilidad de defender el título. Hemos dado el primer
paso, que era muy importante para nosotros”.
Álvaro señalaba que ese encuentro le había ayudado “a volver a coger
esas sensaciones que no tienes cuando no puedes jugar y hacerlo además con
portería a cero, si bien es cierto que no tuve mucha participación.
Pero siempre es importante sumar, encontrar esas sensaciones que tuve el año
pasado jugando y poder tenerlas ahora también porque sé que esta temporada
en cualquier momento puedo jugar y todo esto me va a hacer estar más metido
todavía”.
El arquero riojano valoraba “de manera enorme” que el seleccionador siga
contando con él en las convocatorias. “Para mí, que soy un jugador muy
ambicioso, siempre busco jugar y el hecho de no hacerlo ahora con mi club
y que la selección confíe en mí y apueste por mí es algo muy
reconfortante para mí y para la situación que vivo ahora mismo.
Simplemente, lo que intento hacer es devolverlo con buenos resultados y buen
trabajo y lo que quiero es que esa confianza me la sigan dando en la selección.
Evidentemente será más fácil si juego aquí y tengo mis oportunidades”.
Álvaro también calificaba de “muy positiva” la relación y la competencia
que tiene con Andrés en la portería del Huesca. “Es un gran tipo,
desde el primer día noté que íbamos a tener ese feeling entre
compañeros, que iba a ser muy beneficioso para el equipo. Creo que tanto
él como yo le aportamos todo tipo de cosas positivas a la portería de
la SD Huesca y que tanto si juega él, como lo está haciendo ahora, como
si lo hago yo como pueda hacerlo, siempre va a estar allí para apoyarle, para
trabajar fuerte, para motivar al otro y sobre todo para defender esa portería
que es tan complicada”.
El portero azulgrana se mostraba fuerte mentalmente y consciente de que no puede
ni bajar la guardia ni, como dice el lema del Huesca, reblar. "Un jugador que
quiere tener una amplia carrera deportiva y que quiere jugar en la élite del
fútbol europeo tiene que pasar por todo tipo de momentos y este es uno de
ellos. Saber afrontar situaciones en las que no juegas, en las que trabajas
pero ves que no puedes ayudar a tus compañeros dentro del campo pero también
te sirve para madurar, para saber que esto es largo, que el trabajo siempre da sus
frutos antes o después y es muy importante para el jugador para poder afrontar
estos momentos con calma, con trabajo y con paciencia”.
En cuanto a la situación del equipo, que todavía no ha estrenado su casillero
de victorias, Álvaro considera que el Huesca ha merecido más. “Podríamos
tener perfectamente tres o cuatro puntos más. Eso reconfortaría el trabajo
que estamos haciendo, pero dentro del vestuario somos muy positivos. Creo que
el equipo sabe perfectamente que haciendo las cosas como hasta ahora vamos a sacar
puntos y a conseguir los objetivos establecidos y para eso tenemos que seguir como
estamos, afrontar los partidos con la misma mentalidad y ser conscientes de que
si seguimos así los resultados positivos llegarán”.
Y "para nada", afirmaba, ve el choque con el Valladolid como una final.
“En el mes de octubre no puedes hablar de una final, si bien es cierto que a
priori el Valladolid puede ser un equipo que esté luchando por los mismos objetivos
que nosotros. Es un partido de tres puntos, es muy importante para nosotros pero
por el simple hecho de que buscamos la victoria como lo haremos el fin de semana
siguiente y todos los demás. Pero para nada creo que sea una final. Es un partido
de reconvertir esas sensaciones en tres puntos, que es lo importante, y en
poder avanzar en la clasificación porque lo que queremos es estar lo más
arriba posible”.
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