Julio Luzán respondía a las preguntas de los lectores de DIARIO DEL ALTOARAGÓN
Julio Luzán, creador, ideador, innovador, observador, artista... desde su empresa ICP Tecmolde se ha convertido en un referente tanto nacional como más allá de nuestras por su trabajo con escenografías y decorados en todo tipo de producción y entornos, en los que "la calidad" es siempre marca de la casa y también el hecho de que "no nos asusta trabajar con grandes volúmenes". Y todo ello lo ha logrado sin salir de Loporzano, lugar en el que tiene sus instalaciones y al que llegó hace 30 años y se siente "bien acogido".
HUESCA.- La pasada semana respondía a las preguntas de nuestros lectores
y nos habló de la claves de su éxito internacional, que se basan en "el
trabajo y en estar abierto a los nuevos mercados" y en "no tener miedo a
lanzarnos al exterior" y tampoco a "usar la tecnología" si "te
propones avanzar" pero sin dejar atrás "la parte artesanal" que
siempre es necesaria y en la que intervienen "diferentes oficios".
A Julio, a la hora de recrear cada pieza, lo que más le gusta es "conseguir
los efectos que la gente quiere ver" y "lograr que las cosas se acerquen
a la realidad", junto a "la satisfacción que sientes al verlo acabado",
un momento que define como "muy importante, emocionante e intimo". Unos
trabajos en el caso del cine, que una vez que han cumplido su función, "no
perduran en el tiempo, se destruyen en el momento en el que cumplen su misión".
María Jesús, de Sariñena, preguntaba:
Julio, ¿qué crees que se ha hecho bien en tu empresa para que después
de mucho tiempo tenga tanta proyección internacional?, y ¿cuál es
tu mejor cualidad?
La proyección internacional está basada en el trabajo y en estar abierto
a los nuevos mercados. Una de las cosas que llevamos haciendo muchos años es
el formarnos en el tema de la exportación mediante cursos en los que nos han
enseñado cómo se debe exportar. Y así quitarnos ese miedo a lanzarnos
al exterior, que tanto preocupa a veces. Poco a poco se han ido abriendo mercados
en el exterior a la par que hemos ido avanzando en el trabajo. Hay que decir que
tampoco hemos hecho mucha labor comercial en este aspecto. Ha sido el propio trabajo
el que nos ha traído a los clientes quienes, según nos han ido conociendo
al entregar nuestros trabajos, han ido aumentando tanto por Europa como por el resto
del mundo.
Respecto a mi mejor cualidad, creo que es la observación. Nuestro trabajo se
basa mucho en ella: en lo que vemos, en la naturaleza, en lo que al final tenemos
que reproducir. Por ejemplo, en el mundo del cine tenemos que reproducir ambientes
y paisajes que existen con materiales industriales, por tanto hay que tener un punto
muy importante de observación de los detalles. Si no existe esto, es prácticamente
imposible hacer estos trabajos.
Alba, de Huesca, preguntaba:
¿El secreto del auge de su empresa es mezclar tecnología y arte?
En cierta manera sí. Creo que hay un momento en toda empresa que te preguntas
si continuas trabajando de manera artesanal, formando un equipo no muy numeroso
y atendiendo los mercados más cercanos que tienes; o te propones avanzar para
hacer grandes producciones y en este punto, lógicamente, tienes que echar mano
de la tecnología. Es por esto que la incorporación de las tecnologías
a nuestro trabajo es una parte muy importante.
Andrés, de Huesca, preguntaba:
En estos últimos gracias a las máquinas y la innovación, ¿ha
cambiado mucho el trabajo?
Sí, sí que ha cambiado. Lo que sucede es que, por mucha tecnología
que se incorpore, en el mundo de la escenografía y de la tematización
siempre hay una parte artesanal y manual en el proceso inicial del trabajo y en
el final, en el proceso intermedio es en el que trabajan las máquinas. En ese
proceso inicial, las manos crean y modelan volúmenes y figuras empleando un
criterio artístico. Las máquinas ayudan a producir los grandes volúmenes.
Y después, una vez que salen de las máquinas, también hay una intervención
manual, para la cual contamos con un equipo de taller formado por gente muy preparada
para este tipo de trabajos.
Ricardo, de Huesca, preguntaba:
¿Todo el proceso es automático o sigue siendo un trabajo que se desarrolla
a mano en cuanto al acabado y los detalles finales?
Sí. Como he dicho anteriormente, el proceso tiene una parte muy importante
de criterio artístico. En todos los procesos de nuestros trabajos hay muchos
oficios y muy distintos entre sí: pintores, escultores, soldadores, etc. Pero
hay que saber modelar, tallar y, en definitiva, hacer acabados de calidad ya que
son las personas (los artistas) las que dan ese acabado final y no las máquinas.
Luis, de Huesca, preguntaba:
El avance de las impresoras digitales en 3D que cada ver hacen más cosas,
¿le preocupa?
No, al contrario. Para nosotros es un punto de apoyo. Que las tecnologías avancen
no significa que quiten parcelas a los trabajos, sino que ayudan. Por ejemplo, el
3D y las impresoras nosotros las empleamos para estudiar las proporciones de los
grandes volúmenes y figuras antes de empezar un trabajo. Es bueno, y muy práctico,
ver los modelados a un tamaño medio para poder valorar esas proporciones. Y,
también, hay trabajos de pequeños tamaños que son más rentables
trabajarlos en impresoras 3D que en nuestras máquinas para grandes volúmenes.
Jaime, de Huesca, preguntaba:
Todo el mundo conoce sus trabajos como la calabaza Ruperta, sus paisajes del
parque de atracciones Port Aventura o ha visto los decorados de películas en
las que ha participado, pero, en realidad, no se sabe ni se dice de quien son ¿cree
que obtiene el reconocimiento que merece?
A nivel profesional sí. En el mundo en el que nos movemos, tanto en el cine
como en televisión, publicidad y parques temáticos, estamos reconocidos
profesionalmente.
Piluca, de Huesca, preguntaba:
¿Se siente profeta en su tierra?
No, lo que sí me siento es muy acogido. En los 30 años que llevo con la
empresa en Loporzano, me he sentido muy acogido y valorado por nuestro trabajo,
tanto por la gente de Loporzano como por la de Huesca.
Asunción, de Huesca, preguntaba:
¿Qué le impulsó a dedicarse a esto?
Toda la vida me he dedicado a lo mismo. He hecho muchas cosas, desde escultura hasta
exposiciones y decorados pero a nivel más individual. Lógicamente, cuanto
más avanzas, más mercados se te abren y vas conociendo más campos
en los que puedes aportar tu trabajo.
Sergio, de Huesca, preguntaba:
Tanto el cine como el resto de empresas culturales se han visto seriamente dañados
por los recortes en sector, ¿esta crisis también le ha salpicada a su
empresa?
Sí, como a todo el mundo la crisis nos ha afectado. A nivel de clientes, muchas
veces la publicidad, cuando hay una crisis, es casi lo primero que disminuye. Por
este motivo, es bueno estar abierto a otras cosas y a los diferentes mercados que
hay. También es cierto que cuando el trabajo lo tienes localizado no te preocupas
tanto en expandirte, pero cuando el trabajo empieza a aflojar hay que empezar a
abrirse a nuevos mercados tanto en el exterior como en España. Lo importante
en una situación de crisis, es ampliarnos a esos sectores que muchas veces
tenemos olvidados.
Roberto, de Huesca, pregunta:
¿La clave para ser un genio es estar siempre pensando en innovar?
Creo no hay una genialidad en esto. Pienso que innovar es una manera de avanzar.
Durante todo este tiempo hemos estudiado la manera de avanzar tanto en materiales
como en tecnología. Siempre damos pasos y creamos cosas nuevas. Todo esto es
una constante, si no te mueves, no innovas y si no te preocupas por el I+D de tu
empresa en pocos años puede disminuir tu cantidad de trabajo. Por eso considero
que innovar es muy importante.
María de Barbastro, preguntaba:
¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo?
Lo que más me gusta de mi trabajo es conseguir los efectos que la gente quiere
ver. Para mi es muy importante que, por ejemplo, cuando hacemos una piedra con poliestireno
la gente la reconozca como tal. Me gusta lograr que las cosas se acerquen a la realidad
y conocer la sensación que tiene la gente acerca de esa realidad.
Gemma, de Jaca, preguntaba:
¿Da empleo a mucha gente? ¿Cómo es su equipo? ¿Qué formación
tienen?
En este momento estamos 30 personas trabajando en la empresa. Somos un equipo de
trabajo muy compacto y con un ambiente muy bueno, porque este tipo de trabajo lo
requiere. Sobre todo porque a la gente que trabaja aquí le tiene que gustar
mucho y estar enamorado de su trabajo, de lo contrario es muy difícil porque
la verdad es que se trabaja mucho, pero los resultados de los trabajos son muy satisfactorios.
En cuanto a la formación de las personas que trabajan aquí, tenemos de
todo: ingenieros de diseño, bellas artes, historia de arte… Pero principalmente
es mano de obra cualificada, unida a ese saber hacer natural que tienen algunas
personas, por tanto no es necesario tener una carrera universitaria.
Alejandro de Huesca, preguntaba:
Como artista que le considero, ¿se puede vivir del arte?
Sí se puede vivir del arte. Pero creo que en este momento se puede vivir más
del arte industrial, que es casi un producto, y no tanto del arte puro, a no ser
que ya tengas un cierto reconocimiento profesional y seas un artista consagrado.
Juan, de Huesca, preguntaba:
¿Cómo se ha hecho ese hueco en el panorama internacional para participar
en proyectos como la película de Éxodus? ¿Es muy difícil hacerlo
desde Loporzano?
Éxodus es una película de proyección internacional pero que enlaza
con nuestra trayectoria dentro del mundo del cine, donde se nos conoce como una
empresa de grandes producciones y construcciones tanto nacional como internacionalmente.
Por ello, cuando se trata de algún decorado de gran volumen casi siempre recurren
a nosotros. Y, a parte, conocen la tecnología que empleamos y les damos la
garantía y calidad que ellos quieren.
Hacer todos estos trabajos desde Loporzano ha sido complicado, pero en este momento
la infraestructura está preparada y creo que permite realizar este tipo de
trabajos desde sitios como Loporzano o cualquier pueblo, el nivel de medios lo permite.
Estrella, de Huesca, preguntaba:
Elaborar decorados no es trabajo de un día, llevan horas de dedicación
y en casos como en la película Lo Imposible, una gran obra se los trago y los
hizo desaparecer, ¿Qué se piensa al ver esfumarse todo bajo el agua?
La mayoría de trabajos que nosotros hacemos no perduran en el tiempo, se destruyen
en el momento en el que cumplen su misión. Esto pasa sobre todo en el cine,
aquí el trabajo dura lo que dura el rodaje de la película. En el caso
de los parques temáticos, los trabajos duran más, entre 10 y 15 años,
aunque no perduran para siempre. Pero hay un momento muy importante, emocionante
e intimo que es cuando terminamos un trabajo en el taller. Es la satisfacción
de ver tu trabajo antes de que salga hacia su destino. Por eso cuando un decorado
se destruye a mi ya no me preocupa porque todo lo que tenía que sacar de ese
trabajo ya lo he sacado antes de que salga de Loporzano. También es importante
la satisfacción que sientes a la hora de entregar tu trabajo.
Pilar, de Barbastro, preguntaba:
¿Cuál es, en su opinión, su mejor trabajo?
Nunca he tenido un trabajo o proyecto preferido. Cada trabajo tiene una entidad
propia, todos son diferentes. La verdad que no sabría decidir cual es mi mejor
trabajo. Pero tengo que decir que disfruto mucho de la mayoría de ellos.
Aurora, de Huesca, preguntaba:
¿Hay muchas empresas que se dediquen a lo mismo que hace en Tecmolde?
Hace unos años sí que había muchas. También es cierto que no
contaban con tanta tecnología pero sí que, tal y como se construían
antes los decorados, tenían mucha calidad manual y artesanal de manos de grandes
profesionales. En las grandes ciudades aún quedan empresas así pero hay
que decir que la crisis ha cerrado muchas de ellas. Y a nivel tecnológico no
hay muchas empresas de este tipo.
Luisa, de Zaragoza, preguntaba:
¿Qué les hace ser diferentes a otras empresas que se encargan de hacer
decorados y ambientaciones?
La calidad, que creo que es un aspecto muy importante y que valoramos mucho, y las
grandes producciones y construcciones. En muy poco tiempo podemos producir grandes
decorados y volúmenes, gracias a la tecnología y materiales que estamos
empleando y a la vez innovando dentro del mundo de la escenografía.
Ana, de Huesca, preguntaba:
Teniendo en cuenta su experiencia, ¿cree usted que no es necesario trasladarse
a grandes ciudades como Madrid o Barcelona para llegar lejos?
No es necesario, aunque depende mucho del tipo de trabajo que se realice. La evolución
de los medios en general y de la logística permite una mejor comunicación.
Sí que es cierto que estar en un pueblo requiere un poco más de esfuerzo
puesto que hay que desplazarse y viajar.
Raquel, de Huesca, preguntaba:
¿En que proyectos estás trabajando en estos momentos?
En este momento estamos trabajando en varios parques infantiles en Qatar, estamos
también con un parque temático en España y con los decorados una
gran película que se va a rodar ahora, de la cual no puedo decir el nombre
hasta que se vaya a estrenar.
Alicia, de Jaca, preguntaba:
¿De qué proyecto se siente más orgulloso? ¿Y cuál de
ellos ha sido el de mayor envergadura?
El proyecto de mayor envergadura que hemos hecho fue el año pasado en la nueva
ampliación de Port Aventura, Angkor. Ahí se movieron miles de metros de
escenografía, es el mayor proyecto que hemos hecho hasta la fecha. Me siento
orgulloso de los proyectos más grandes, porque tienes que emplear muchos medios
y hay mucha producción para realizarlos, por eso el empeño que se pone
en estos trabajos hace que te sientas más orgulloso. Así que si tengo
que sentirme más orgulloso de un proyecto quizás sea de Angkor y de Lo
Imposible.
Jesús, de Huesca, preguntaba:
¿Qué premios ha recibido tras dos décadas de carrera?
Ninguno. En el cine, por ejemplo, no existe una categoría específica de
construcción de decorados, nos engloban en la categoría de efectos especiales.
En el caso de Lo Imposible que ganó el Goya a mejores efectos especiales nos
nombraron en el discurso de agradecimiento. Premios directos no hemos recibido,
pero reconocimientos profesionales muchos.
Pedro, de Huesca, preguntaba:
Cuando va al cine, ¿se centra en el argumento o sólo está pendiente
de de los decorados y la ambientación? ¿Y piensa cómo lo habría
hecho usted?
La verdad que estoy muy pendiente de los decorados y, sobre todo, cuando son nuestros
porque observo los acabados y cómo han resuelto las escenas; aprendo mucho
viendo las películas en las que hemos trabajado.
|