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PANDEMIA DE CORONAVIRUS

Casado acusa a Sánchez de mentir y duda si seguir prestándole apoyo

Ciudadanos y ERC elevan el tono de sus críticas al Gobierno y a la desescalada planteada

MADRID.- El líder del PP, Pablo Casado, alimentó este miércoles la posibilidad de abandonar el apoyo al Gobierno durante la sucesiva aplicación del plan de "desescalada", ya que acusó a Pedro Sánchez de mentir, de no informarle nunca y de "hacer el ridículo", y por ese camino los populares no irán.

Un día después de conocerse el proyecto del Ejecutivo para transitar hacia "una nueva normalidad", la oposición lo criticó en el Congreso de los Diputados por el contenido y por el procedimiento seguido para la aprobación en el Consejo de Ministros.

PP, Cs y ERC coincidieron en lamentar que no hubieran sabido ningún aspecto del plan hasta que el presidente compareció por televisión.

El popular no fue el único partido que en la sesión de control del Congreso amenazó con un cambio de criterio.

Si bien ERC nunca ha votado a favor de los diferentes estados de alarma que se han ido autorizando, ya que se ha decantado siempre por la abstención, su portavoz, Gabriel Rufián, también dio pie a un giro: pidió al Gobierno que reflexione sobre si quiere mantener el caudal de apoyos logrado en la investidura de Sánchez.

El Congreso avaló el martes por unanimidad la puesta en marcha de una comisión para la reconstrucción del país tras la crisis del coronavirus, pero Casado y Sánchez volvieron a escenificar este miécoles la ausencia de sintonía.

El presidente del Gobierno exigió al líder del PP que deje atrás su "actitud intransigente" y otra vez le pidió que "arrime el hombro".

Pero también recriminó las políticas que el Partido Popular ha llevado a cabo en las comunidades autónomas en las que ha gobernado o en las que gobierna, caracterizadas, a su juicio, por recortes en el estado de bienestar y la precarización de las relaciones laborales.

El líder del PP, por su parte, pidió al presidente que deje de mentir y que le informe por una vez sobre sus planes. El martes Casado lamentó horas antes de que Sánchez desgranara el plan de "desescalada" que no podía opinar sobre él sencillamente porque nadie del Gobierno le había comentado nada.

Una vez conocido el contenido del plan, Casado lo criticó. "¿Nos puede decir cómo va a garantizar la desescalada si no sabemos cuántos asintomáticos se van a tomar el vermú?", le preguntó.

Sus reproches se extendieron además a la previsión de que habrá una nueva petición de prórroga del estado de alarma, que sería la cuarta.

Como Casado tampoco ha sido informado por el Gobierno sobre ello, a pesar de que el PP ha respaldado las tres autorizadas, espetó a Sánchez: "Puede seguir haciendo el ridículo, pero no nos pida que lo hagamos con usted".

Un miércoles más en el Congreso, el presidente y el líder del PP airearon sus diferencias. En cuanto terminó el minuto de silencio acordado por todos los grupos, en homenaje a las víctimas por el coronavirus, intercambiaron reproches.

También los intercambiaron Sánchez y el portavoz adjunto de Cs, Edmundo Bal. Cs es otro de los partidos que hasta la fecha ha dado su voto a favor a todas las prórrogas del estado de alarma.

El diputado criticó el planteamiento del Ejecutivo para recalar en "la nueva normalidad" por cuanto no es "ni seguro ni serio".

Si bien reiteró la posición de su partido de mano tendida, recordó al presidente que ésta "no es un cheque en blanco", y más cuando con la "desescalada" ha generado "mucha preocupación" a las familias.

Sánchez reiteró que él, como presidente, asume "en primera persona" los errores que ha cometido el Gobierno en la gestión de la crisis del coronavirus, pues errores ha habido, y esto lo admitió el líder socialista, pero también aciertos.

Hizo autocrítica y pidió, por ello, que también la hagan el PP y Cs, partido, recordó, que integra los gobiernos de Madrid o de Murcia, comunidades en los que cabría fortalecer el sistema sanitario.

ERC, aliado del PSOE y de Unidas Podemos en el Congreso desde que salió adelante la investidura de Sánchez, expresó su malestar con la gestión de la emergencia sanitaria.

Gabriel Rufián, quien preguntó a la vicepresidenta Teresa Ribera, encargada de coordinar el plan anunciado este martes, pidió al Gobierno que reflexione sobre "si quiere mantener" el caudal de apoyo de la moción de censura de 2018 y de la propia investidura.

"¿Cuánto les importa la legislatura? ¿Mucho? ¿Poco? ¿Son conscientes de la alternativa a no dialogar y a no entenderse con nosotros -Santiago- Abascal y sus colegas", enfatizó el portavoz de ERC antes de reprobar que a lo largo de los 47 días acumulados de sucesivos estados de alarma no haya habido diálogo.

Rufián también fue crítico con el plan de "desescalada", plan que en líneas generales no sabe con detalle la oposición.

Varios grupos, por esta razón, registraron este miércoles una serie de peticiones de comparecencia.

JxCat solicitó que acuda Sánchez y Cs hizo lo propio con el ministro de Sanidad, Salvador Illa; el PP directamente exigió las asistencias de todos los integrantes del Ejecutivo.

El Gobierno no se ha dirigido aún al Congreso para pedir que le autorice una nueva prórroga del estado de alarma, pero si lo hace, el debate tendrá que celebrarse a lo largo de la semana que viene.

Hasta ahora han votado en contra Vox, la CUP y JxCat, pero otros partidos han dado muestras de su disconformidad con la gestión. PP, ERC y el PNV son algunos de ellos.