Felipe VI da su apoyo en La Rioja al sector del vino

HARO.- Los Reyes expresaron su apoyo en La Rioja al sector vitivinícola, que Felipe VI considera un referente de la "Marca España", y confiaron en su recuperación tras los efectos provocados por la pandemia de coronavirus.

La pareja real visitó la comunidad riojana (en concreto las localidades de Haro y Santo Domingo de la Calzada) en la que fue su octava etapa en la gira autonómica que están realizando y que con este desplazamiento llegó a su ecuador.

Al igual que en las visitas anteriores, no hubo referencia alguna a la situación provocada por las noticias en torno a los presuntos negocios ocultos de don Juan Carlos.

Sí preguntaron los periodistas a la presidenta de La Rioja, Concha Andreu (quien acompañó a los reyes junto a la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto), por el ánimo del monarca tras esas informaciones.

"He visto al rey muy alto y muy guapo y a doña Letizia también muy guapa y bien peinada", bromeó sin querer hacer más consideraciones al respecto.

Don Felipe y doña Letizia iniciaron su visita en Haro, una localidad emblemática del sector del vino y el enoturismo y en la que visitaron su estación enológica (el principal laboratorio de vino en España) y varias bodegas y se reunieron con representantes del sector.

Más allá del apoyo que trasladaron con su mera presencia en Haro, fue en esa reunión donde el rey lanzó un mensaje de ánimo.

Según Zarzuela, Felipe VI resaltó que se trata de un sector tradicional que supone un referente de "Marca España" y animó a seguir haciendo esfuerzos para lograr pronto su recuperación tras la pandemia.

En ese sentido, hizo hincapié en el futuro que tiene este sector y que viene avalado por su gran pasado.

Por su parte, la reina se interesó por la formación dual en el ámbito vitivinícola.

Los bodegueros estuvieron encabezados por el presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada Rioja, Fernando Salamero.

La principal preocupación del sector en la actualidad pasa por la drástica caída de ventas debido a que el vino de Rioja mayoritariamente se consume en el sector de hostelería y restauración.