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CONGRESO FEDERAL

Felipe González cierra filas con Pedro Sánchez pero le pide estimular opiniones críticas

La apertura oficial del 40 Congreso Federal socialista ha sido el escenario en el que un abrazo entre González y Sánchez ha sellado su acercamiento

El expresidente del Gobierno, Felipe González; el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y el exvicepresidente de la Comisión Europea Joaquín Almunia.
El expresidente del Gobierno, Felipe González; el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y el exvicepresidente de la Comisión Europea Joaquín Almunia.
E.P.

El expresidente del Gobierno Felipe González ha aparcado este sábado sus reproches a decisiones del líder del PSOE, Pedro Sánchez, para cerrar filas con él, garantizarle lealtad y ponerse a su disposición, pero pidiéndole que estimule la libertad en el partido para expresar opiniones críticas.

La apertura oficial del 40 Congreso Federal socialista celebrado en Valencia ha sido el escenario en el que un abrazo entre González y Sánchez ha sellado su acercamiento entre aplausos de los casi 3.500 delegados e invitados asistentes a esta cita que desde la dirección del PSOE se ha planteado como la de la unidad en el partido.

La unidad se ha querido simbolizar con la presencia junto a Sánchez de González, del otro expresidente socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, y del ex secretario general del PSOE Joaquín Almunia.

Una ovación de más de dos minutos ha acompañado la entrada en el plenario del Congreso de los tres predecesores de Sánchez en la dirección socialista, aclamación que ha tenido réplicas durante las intervenciones de González y Zapatero.

El primero de ellos, tras sus críticas previas a decisiones como los indultos a los dirigentes independentistas catalanes o la actitud que se ha de tener con Venezuela, ha aprovechado para asegurar su lealtad con un proyecto político que ha recordado que él encabezó y cuya responsabilidad recae ahora en Sánchez.

Ha afirmado que este sabe que está disponible para lo que necesite y que opina si le preguntan, pero sin interferir en ningún momento.

Pero a la vez, le ha lanzado una petición: "Le pido que estimule la libertad de expresarse críticamente, la libertad para opinar lo que se piensa y la responsabilidad de pensar lo que se dice. Así se construye un gran partido que representa a la sociedad".

González ha afirmado que se siente libre para seguir "diciendo lo que piensa y pensando lo que dice", aunque ha lamentado que muchos hagan interpretaciones interesadas de sus palabras.

Ha reivindicado, asimismo, los logros del "régimen del 78", ha reprochado al PP el bloqueo de órganos constitucionales cuando dice defender la máxima norma legal y, en alusión a los independentistas catalanes, ha recalcado que la Constitución y el ordenamiento jurídico es la base fundamental de la convivencia y todos han de respetar las reglas del juego.

Zapatero le ha precedido en el estrado con una intervención en la que se ha prodigado en elogios a la labor de Sánchez, asegurando que "sólo piensa en el porvenir de España y en la decencia de ese país", y ha dicho estar convencido de que de este "congreso de unidad" saldrá un partido que va a ganar los próximos ciclos electorales.

Parte esencial de su discurso ha sido el logro de haber derrotado a ETA, momento en el que ha puesto en pie al plenario al reivindicar el protagonismo de Alfredo Pérez Rubalcaba.

Pero también ha vertido críticas al PP por "derechizar la derecha", una actitud que ha augurado que no le va a dar rédito.

González y Zapatero han protagonizado una jornada cargada de nostalgia a la que ha contribuido un recuerdo a Rubalcaba y a otros destacados socialistas ya fallecidos como Carme Chacón, Pedro Zerolo o Carmen Alborch.

El PSOE ha viajado a sus orígenes con un discurso del fundador del partido, Pablo Iglesias, que ha subido al escenario en forma de holograma para ahondar en el mensaje de unidad omnipresente en este cónclave.

"Vuestra fuerza está en vuestra unión. Juntos seréis invencibles y capaces de poner fin a toda tiranía y a toda injusticia", ha dicho ante Sánchez, los expresidentes, ministros, líderes territoriales, delegados e invitados.

En clave política, la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, ha acusado al líder del PP, Pablo Casado, de "atizar el rencor" entre los españoles de diferentes territorios y de "actuar en contra" del conjunto de ellos cuando siembra desconfianza sobre la economía estatal en foros internacionales.

Y los secretarios generales de CC. OO., Unai Sordo, y UGT, Pepe Álvarez, han aprovechado para pedir a Sánchez que derogue la reforma laboral y reconstruya un nuevo pacto social que haga frente a los nuevos retos que afrontar el país.

También han acaparado la atención de los medios dos exdirigentes del partido que han acudido como invitados: la expresidenta andaluza Susana Díaz y el exministro y exsecretario de Organización del PSOE José Luis Ábalos.

Díaz, que se enfrentó a Sánchez en las anteriores primarias, ha acudido tras hablar por teléfono con el presidente: "A él le alegra que yo esté aquí, y a mí me alegra que él se alegre de que esté aquí", ha dicho.

Por su parte, Ábalos, que salió del Gobierno el pasado mes de julio y no ha hablado desde entonces con Sánchez, ha asegurado estar "encantado" de participar en este congreso sin responsabilidades y ha afirmado no necesitar ningún tipo de reconocimiento por su labor.

En medio de este ambiente festivo y pacífico queda pendiente la elección de la nueva ejecutiva socialista, que será más reducida que la actual y de la que ya han trascendido algunos nombres, y el debate y votación de las enmiendas a la ponencia marco sobre asuntos como el modelo de Estado o la financiación autonómica.

Ante este asunto, el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha avanzado que, una vez que sea elegido responsable de política autonómica del PSOE, llamará al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para plantear una posición común de su partido ante la reunión prevista de varias comunidades el 2 de noviembre.