Aragón

ALTO ARAGÓN - COLABORAN: CAJA RURAL DE ARAGÓN Y DIPUTACIÓN DE HUESCA

La marcha de cinco vecinos se traduce en dos concejales menos y pérdida de ingresos

MUNICIPALES: El descenso de población se refleja en la cita con las urnas y en los recursos que reciben, por lo que en municipios como Argavieso temen por el mantenimiento de los servicios

La marcha de cinco vecinos se traduce en dos concejales menos y pérdida de ingresos
La marcha de cinco vecinos se traduce en dos concejales menos y pérdida de ingresos
P.S.

La marcha de cuatro vecinos de Fanlo y de cinco de Argavieso ha provocado la pérdida de dos concejales en los ayuntamientos. La provincia de Huesca elegirá un total de 72 ediles menos y baja en 2.977 electores. La citadas localidades, al quedarse con menos de 101 vecinos, pasan de cinco a tres ediles, como sucede en Puente de Montañana, Sopeira, Ibieca o Loscorrales. El problema ya no es solo que habrá menos manos para trabajar por el municipio sino que pierden ingresos.

El dato de referencia para las elecciones del 26M es el padrón de 1 de enero de 2018, por lo que en algunos municipios no refleja la realidad actual. De hecho, en Argavieso su alcaldesa, Mónica Soler (PP), está convencida de que ahora ya no perderían los concejales gracias a dos familias que llegaron a mediados de 2018.

Con todo, no lamenta tanto esa pérdida, porque "si hay armonía y la gente quiere colaborar, va a trabajar por el pueblo", como la de ingresos. "No pierdes el IBI, pero sí por el impuesto de circulación y por los ingresos que llegan de las diferentes administraciones, que en algunos casos son variables en función de la población", indica. "Si ya somos pequeños y tenemos problemas de financiación, si cada vez hay menos gente, va a ser difícil poder mantener los servicios", comenta.

Argavieso no tiene más núcleos y tampoco es un ayuntamiento rico porque sus únicas fuentes de ingresos son el arriendo del monte público y un piso que tienen alquilado. Pero al margen de esta situación, la localidad ha perdido población paulatinamente desde 2007, cuando contaba con 135. Por eso, tampoco es fácil hacer listas. El PP presenta a tres, uno el PSOE y otro el PAR, aunque ninguno de estos últimos tiene vinculación con el pueblo. Si Mónica repite, será su tercer mandato.

"Ya me gustaría poder asentar población y que las empresas se deslocalizarán, pero a veces hablamos mucho de las empresas y también podría instalarse la administración en el medio rural", comenta. A su juicio, hay que facilitar el trabajo, especialmente el de los jóvenes y las mujeres.

En Fanlo, las cifras son similares y su alcalde, Horacio Palacio (PAR), tampoco le ve mucha solución a la despoblación. Con todo, ve en la ganadería, a lo que él se dedica, una oportunidad para los jóvenes. En este caso, los vecinos se reparten entre Buerba, Nerín, Yeba, Vio, Buisán; y el propio Fanlo, donde durante todo el año hay ocho casas abiertas. A fecha de 1 de enero de 2018 había 97 empadronados, por lo que pierden dos ediles. Ahora, superan el centenar, por el asentamiento de varios extranjeros.

Horacio fue alcalde socialista entre 1983 y 1995, volvió en 1999 con el PAR y desde entonces está al frente. En su pueblo, se han presentado cuatro listas, la del PAR con dos candidatos, la del PSOE con otros dos del municipio y las de Chunta y el PP, con uno, ambos de fuera. En su caso, nombra alcaldes en cada uno de los núcleos para trabajar por el pueblo, por lo que en este sentido tampoco le preocupa la pérdida. Sin embargo, le inquietan más las dificultades para mantener la población en el medio rural. "Ya no es solo que venga gente, hay que apoyar a los que ya están para que no se tengan que ir", señala.