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ALTO ARAGÓN - PATRIMONIO

El Obispado de Huesca valorará el estado de la iglesia de El Tormillo

El Consistorio ofrece sus dependencias para que los feligreses puedan asistir a los cultos

Los obispados de Huesca y Jaca dan instrucciones a sus parroquias
Los obispados de Huesca y Jaca dan instrucciones a sus parroquias
C.S.

HUESCA.- El Obispado de Huesca ha anunciado que realizará una valoración de las obras de rehabilitación de la iglesia de El Tormillo, en el término de Peralta de Alcofea, que se encuentra cerrada desde el pasado 24 de junio tras el último decreto de Alcaldía que firmó Obdulia Gracia antes de dejar el cargo el día 14 del mismo mes.

El pasado martes 2 de julio se obtuvo permiso y se celebró un funeral en el templo con las pertinentes medidas de seguridad. En cualquier caso, desde el Obispado de Huesca recalcan que la iglesia continúa cerrada al culto y está prohibido el acceso hasta nueva orden.

De este modo, el Obispado indica que "realizarán una valoración del estado del edificio y si lo ven necesario realizarán algunas intervenciones".

También ha anunciado que "se recurrirá el comunicado del Ayuntamiento" en el que se ordenaba el cierre, con la previsión de que "se pueda abrir la iglesia con toda seguridad".

En declaraciones a este periódico, el alcalde de Peralta de Alcofea, Sergio Gambau, comenta que el Obispado de Huesca acató las órdenes del decreto de Alcaldía del 14 de junio, por lo que se cambiaron las llaves para evitar que ninguna persona ajena al templo pudiese entrar y correr algún riesgo.

El nuevo equipo de gobierno que lidera Sergio Gambau ya ha mantenido conversaciones con el Obispado de Huesca. "Sabíamos que la iglesia tenía deficiencias y grietas. No esperábamos el decreto el día 14 pero lo acatamos", indica el primer edil.

Mientras se adopta un decisión de arreglo de la iglesia, el Ayuntamiento ha ofrecido sus dependencias municipales en El Tormillo para que los feligreses puedan seguir asistiendo a los cultos religiosos.

El alcalde de Peralta de Alcofea ha dejado claro que el Obispado de Huesca "ha manifestado su voluntad de solucionar la situación".

En cuanto al deterioro de la iglesia de El Tormillo, el alcalde explica que la grieta "se encuentra en la parte sur del templo y afecta a la estructura del coro". Precisamente, para poder abrir la iglesia el pasado martes 2 de julio de forma excepcional para oficiar un funeral, se bloqueó el acceso a la zona del coro tras acordarlo con el Obispado.

También se acordó que el párroco de la iglesia de El Tormillo custodiara las llaves, "para que ninguna persona ajena a la iglesia pueda entrar y evitar riesgos". La idea, subraya el primer edil, "es poder actuar en breve pero dependerá de las pruebas técnicas". A juicio del alcalde, "la iglesia no se caía hace cuatro años ni ahora porque la grieta estaba ya y el estado de la iglesia es el mismo que en 2017". Asimismo indica que "no hay ningún indicio de su evolución al no haberse realizado ninguna prueba técnica" por lo que se está a la espera de una valoración de su estado.

COMIENZAN LOS ARREGLOS EN LA PARROQUIA DE BARLUENGA

Las obras para frenar el deterioro de la iglesia de San Andrés de Barluenga, perteneciente al municipio de Loporzano, ya han comenzado. Se procedió a cerrar el acceso al templo y a vallar su perímetro el 24 de mayo, tras los desperfectos ocasionados en el tejado y la caída de tejas. El objetivo era garantizar la seguridad vial de feligreses y viandantes.

Según informan fuentes del Obispado, después de un estudio del estado que presentaba la iglesia se aprobó una intervención rápida para evitar la entrada de agua, con la colocación de testigos en la zona del ábside.

Unos trabajos, aseguran las mismas fuentes, que están valorados en un total de 25.000 euros y se estudia cómo afrontar su financiación. Desde el Obispado de Huesca destacan que los vecinos han acogido muy bien el inicio de los trabajos en la iglesia.

Por su parte, el alcalde de Loporzano, Roberto Malumbres, expresa que con este permiso de obras "se podrán retirar las tejas peligrosas que quedaron en el alero" con la instalación de un andamiaje y una zona perimetral de seguridad.

Unas obras que, según añade el primer edil, "irán bien, en primer lugar para eliminar el peligro a los viandantes y después para la restauración del inmueble".