Aragón

ALTO ARAGÓN - RESCATES

Junio trajo un "repunte" de rescates de senderistas con respecto al año pasado

Este tipo de actuaciones suelen ser menos complejas pero son las que "más hipotecan" los recursos

Junio trajo un "repunte" de rescates de senderistas con respecto al año pasado
Junio trajo un "repunte" de rescates de senderistas con respecto al año pasado
G.C.

HUESCA.- Las primeras semanas del verano han traído un "repunte" de actuaciones de auxilio a senderistas por parte de los grupos de rescate e intervención en montaña de la Guardia Civil. Aunque, por lo general, estas actuaciones son menos técnicas y complicadas que los rescates en paredes verticales, en alta montaña o en invierno (cuando la nieve, el hielo o la niebla son un plus de dificultad añadido) el hecho de que su número se dispare hace que acaparen los recursos humanos y técnicos de los que dispone la Guardia Civil.

Así lo asegura el jefe accidental de los grupos de rescate e intervención en montaña de la Guardia Civil de la provincia, el subteniente Fernando Navarro, quien aclara que al hablar de senderismo se refieren tanto a rutas de fácil acceso, baja altura y recorrido corto, como a aquellas que pasan por collados altos e incluso pueden acercarse a cimas.

El subteniente apunta que en el mes de junio la cifra de rescates de montaña en su conjunto ha sido muy similar a la del mismo mes del año pasado, aunque resalta que ha habido un aumento de intervenciones para auxiliar a senderistas durante el mismo periodo de tiempo con respecto al año pasado.

"En el resto de tipología de accidentes no ha habido una oscilación importante", afirma, pero en senderismo "ha habido un repunte" en el mes de junio y, en lo que llevamos de julio también se aprecia un incremento "en senderismo y un poco en alta montaña".

El jefe accidental señala que los rescates de senderistas, por lo general, "son los menos complejos técnicamente de realizar", aunque alguno de ellos lleve aparejadas circunstancias que lo pueden complicar, como el mal tiempo o la noche. Sin embargo, "son los que más hipotecan los recursos" al ser los que más se repiten.

A su juicio, la cultura de hacer deporte puede influir en que la gente salga ahora más al monte que hace unos años, lo que aumenta las posibilidades de accidentes, sobre todo en verano, ya que en invierno la nieve frena la salida de senderistas a la alta montaña.

De hecho, "esa tipología de rescates en invierno prácticamente no se da, dentro de que también existen accidentes", manifiesta. Sin embargo -asegura- "cuando llega la temporada estival, es el tipo de accidente que más se repite". La afluencia de más personas a la montaña en época estival se traduce en la presencia de una masa de senderistas heterogénea, entre las que hay personas más formadas en cómo afrontar determinadas circunstancias y otras que lo están menos. Esa formación es importante tanto para encarar imprevistos y problemas como para saber qué es preciso llevar cuando se va al monte.

Una circunstancia que a principios de verano suele darse es la existencia de neveros en altura. El año pasado se caracterizó porque hasta bien entrado el verano seguían persistiendo muchos en muchas zonas del Pirineo, lo que causó accidentes y fue uno de los motivos para llamar a extremar la prudencia.

Este año, a mediados del mes de junio "todavía había bastantes neveros", sobre todo en las zonas situadas en la cara norte, pero tras las olas de calor vividas, la nieve ha ido desapareciendo "y ahora mismo, excepto en las zonas típicas como el Aneto, Posets o la cara norte del Perdido, la nieve ya es muy escasa".

No obstante, el subteniente observa que el calor "hace bajar la guardia" en el sentido de no llevar crampones o piolet para transitar por un nevero.

Una vez más, el subteniente Fernando Navarro incide en la recomendación de planificar bien la ruta a realizar, recopilar toda la información posible al respecto e ir bien equipado (con ropa de abrigo aunque sea verano, calzado adecuado, agua, comida, un botiquín o un frontal, entre otros elementos).

A su entender es muy importante planificar y tener información, porque considera que nadie, conscientemente, quiere ser negligente, pero el no tener formación e información adecuada puede ser causa de un accidente. "No te puedes dejar llevar solo porque hace muy buen día", señala, para ilustrar que cuando se sale a la montaña hay que ir preparados para afrontar los imprevistos.