Aragón

ECONOMÍA

La Cámara de Cuentas analiza el cumplimiento de sus medidas

El órgano fiscalizador de la Comunidad deberá aumentar su plantilla

La Cámara de Cuentas analiza el cumplimiento de sus medidas
La Cámara de Cuentas analiza el cumplimiento de sus medidas
C.A.

ZARAGOZA.- La Cámara de Cuentas de Aragón hará a partir de ahora un seguimiento para evaluar el cumplimiento y la implantación de sus recomendaciones porque quiere ser un organismo "útil" para la sociedad, e incorporará a sus auditorías habituales otras que susciten el interés de la ciudadanía.

Para abordar este nuevo trabajo, el órgano fiscalizador requerirá aumentar su plantilla, ahora compuesta por 27 trabajadores, ya que con los recursos actuales difícilmente llegan a todo.

Estas son algunas de las consideraciones que realizó el presidente de la Cámara de Cuentas, Alfonso Peña, tras presentar al presidente de las Cortes de Aragón, Javier Sada, el Plan Estratégico 2020-2021 del órgano.

Este programa pretende "relanzar al futuro" la Cámara de Cuentas y darla a conocer a la ciudadanía como un órgano "útil" para el buen funcionamiento de las instituciones públicas, diez años después de su nacimiento.

Por ello, además de fiscalizar de manera independiente la actividad económico-financiera de la Comunidad Autónoma y del sector público, la Cámara de Cuentas se plantea ahora incluir informes sobre asuntos de interés para la ciudadanía. "Creemos que en el margen que nos queda disponible de utilización de nuestros recursos, podemos hacer otro tipo de informes que notamos por las sugerencias que se nos hace de las Cortes, que pueden tener interés por parte de los ciudadanos", indicó.

Los últimos años han hecho algunas "pruebas" como la auditoría de los servicios de depuración de aguas de la Comunidad, la gestión de Ecociudad o la revisión de los Fondos de Inversión de Teruel. "Somos conscientes de que cuando hacemos este tipo de trabajo tiene un impacto inmediato en la opinión pública", argumentó.

Con este mismo objetivo de ser un órgano eficaz, la Cámara de Cuentas se ha fijado una meta "importante": la incorporación de un método para evaluar el seguimiento de sus recomendaciones, aunque no son de obligado cumplimiento.

Sobre esta cuestión, Peña aseveró que quieren conocer el nivel de cumplimiento de sus propuestas para exigir explicaciones a los gestores responsables cuando no se hayan implantado. Quieren saber si las recomendaciones de más calado se han incorporado y, en caso negativo, conocer las causas. "Las recomendaciones tienen que cumplirse o si no, explicar las razones por las que no se han cumplido. No podemos permitir que no consigan su objetivo", manifestó. Aunque ahora no tienen esos datos, Peña reconoció que no siempre les hacen caso. La administración autonómica, matizó, tiene más "resistencia" a implantar las mejoras que las entidades locales, precisamente por la complejidad organizativa.

Puso como ejemplo el Gobierno de Aragón, una entidad que suele incorporar las propuestas pero a un ritmo muy lento, entre otras cuestiones, porque en ocasiones no es sencillo.

Por el contrario, la Universidad de Zaragoza es la institución más rápida a la hora de implementar las mejoras debido a la capacidad ejecutora que tiene el rectorado.