Aragón

ALTO ARAGÓN - COLABORAN: CAJA RURAL DE ARAGÓN Y DIPUTACIÓN DE HUESCA

Vicente Pinilla: "Unas acciones son interesantes en un sitio y en otro no, por lo que hay que ir a un marco local"

#CONTRALADESPOBLACIÓN

HUESCA.- Nunca había importando tanto la demografía. ¿Es el momento de dejar el victimismo y cambiar el enfoque para ver qué se puede hacer?

-Nosotros no somos nada victimistas, porque nuestra filosofía no tiene unos objetivos que a veces se observan. En la etapa de Marcelino Iglesias, este decía que Aragón tenía que tener 2 millones de habitantes. ¿Por qué? No somos victimistas porque creemos que hay que acompañar las decisiones de la gente. Ahora bien, si hay procesos de despoblación muy intensos, tenemos que evaluar las consecuencias. Si hay bosques sin cuidar y esto genera problemas medioambientales, habrá que diseñar políticas. Hay pueblos de personas más mayores que no tienen capacidad para proponer iniciativas, entonces habrá que facilitarles la vida. Estamos en esta escena de entender la pluralidad. Esto no se puede hacer de arriba a abajo sino al revés. Hay muchas iniciativas locales que van en esta dirección, vamos a potenciarlas.

Esta sección trata de poner en valor las iniciativas y cambiar la mirada sobre el medio rural porque si estaba denostado socialmente eso podría alentar el proceso. ¿Quizá ahora se ve de otra forma y hay más jóvenes que quieren quedarse?

-No hay ninguna duda que en las zonas rurales donde hay asociacionismo, iniciativas, más cohesión social y más capital esto favorece los proyectos vitales de la gente. No es lo mismo vivir en un lugar donde parece que es una condena a donde la gente se mueve. Efectivamente, puede haber un cambio de mentalidad, de que hay un modo de vida alternativo para quien le interese. Porque puede haber gente que haya nacido en el medio rural o en el urbano y que quieran cambiarse. Quedarse en el medio rural es una opción, pero tendrá que estar apoyada para que no se convierta en una condena. Si cuando llegan sus hijos a una edad el instituto está lejos, si para poner empresas hay trabas, si no hay vivienda... Ahí sí se puede hacer algo.

En la provincia, hay pueblos donde nunca hay promociones y en los turísticos el precio de la vivienda es muy alto. La Diputación Provincial ha propuesto cambios legislativos para que los ayuntamientos puedan intervenir.

-Aquí sí que hay lugar para las políticas. En muchas zonas rurales es hasta difícil saber cuál es la oferta de vivienda, o vives allí o no lo sabes. Se pueden realizar inventarios de viviendas que estén en disposición de ser alquiladas o en algunas zonas ofertas laborales, alquileres sociales, de promociones... Pero al final habrá que ir a un marco local para ver qué pasa. Unas acciones en unos sitios son interesantes y en otros no.

Dar herramientas a las administraciones locales.

-Esta es la filosofía. Dentro de la general, hay que tener este enfoque local para ver las necesidades que hay en cada lugar, que pueden ser diametralmente diferentes. Las administraciones deberían de decir en qué áreas es importante actuar, con la vivienda, las redes de comunicaciones...