Aragón

ALTO ARAGÓN - SECTOR AGROGANADERO

Se prohíbe por ley la venta de un alimento por debajo de los costes de producción

Esta práctica será sancionada con un máximo de 100.000 euros, que puede aumentar a un millón si es reiterada

Se prohíbe por ley la venta de un alimento por debajo de los costes de producción
Se prohíbe por ley la venta de un alimento por debajo de los costes de producción
EFE

MADRID.- La venta de un alimento por debajo de los costes de producción, denominada venta a pérdidas, será sancionada con un máximo de 100.000 euros y un mínimo de 3.001 euros, según una modificación de la Ley de la Cadena Alimentaria que prohíbe esta práctica, reclamada ampliamente por el sector primario y aprobada este lunes por el Gobierno.

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, detalló tras el Consejo de Ministros que vender a pérdidas se tipifica como infracción grave y, si es una práctica reiterada, "puede pasar a muy grave", es decir, entre 100.001 y un millón de euros. Más allá de las cuantías, Planas, que este martes por la tarde se reunió con los representantes de las organizaciones agrarias para explicarles las medidas aprobadas, puso el foco en la publicidad de las sanciones graves y muy graves por la afectación a la "reputación" del operador que incumpla la ley.

La venta a pérdidas se penaliza, por tanto, de forma generalizada salvo en dos excepciones: los productos perecederos antes de que se estropeen y los descuentos y promociones aplicados por las cadenas de distribución al consumidor, que deberán ser asumidos por estas empresas y no se contabilizarán a la hora de calcular el coste.

La modificación incrementa las sanciones previstas si no se cierran los contratos por escrito. En la Ley de 2013 esta era una infracción leve y ahora pasa a ser grave.

Se obliga también a incluir en los contratos que firman los agricultores con los fabricantes y supermercados el coste de producción original, cuyo cálculo acordarán las partes o bien se guiarán por índices de referencia públicos que, según el ministro, ya están disponibles y se irán ampliando.

En ese sentido, se podrán tener en cuenta factores tales como los costes de las semillas y las plantas de vivero, energía, herbicidas, fitosanitarios o costes laborales.

Además, a partir de ahora se prohíben las "promociones de carácter engañoso" que inducen a "error" sobre el precio e imagen de los productos.

Las organizaciones de consumidores y usuarios habían mostrado su preocupación por el posible encarecimiento del precio del producto en el punto de venta como consecuencia de estas medidas, pero Planas no cree que vaya a suceder: "Si cada uno consigue asumir su responsabilidad en la cadena alimentaria es perfectamente posible que el precio de venta al público no se incremente".

Por otro lado, el papel de la Agencia de Información y Control Alimentario (Aica) se verá reforzado para velar por el cumplimento normativo, dijo el ministro, quien también pedirá a las comunidades autónomas implicación en este cometido.

El paquete de medidas incluye otras novedades, como permitir el pago fraccionado de los impuestos por la ayuda concedida a jóvenes agricultores que se incorporan a la actividad y una bonificación dirigida a los empresarios agrícolas para incentivar la conversión de contratos eventuales en fijos discontinuos.