Aragón

ALTO ARAGÓN - PANDEMIA DE CORONAVIRUS

El sector turístico de la provincia, ante el reto de recuperar su actividad

Muchas empresas abogan por el optimismo con ideas creativas e imaginación

El sector turístico de la provincia, ante el reto de recuperar su actividad
El sector turístico de la provincia, ante el reto de recuperar su actividad
S.E.

HUESCA.- El sector turístico de la provincia se encuentra ante el reto de reabrir sus negocios de forma progresiva y cumplir las normativas de distanciamiento social en las sucesivas fases de desescalada. Mientras, la incertidumbre aflora en muchos establecimientos por las pérdidas generadas durante el estado de alarma y su viabilidad de cara a su recuperación en el contexto de crisis económica venidero.

"Imponer un límite del 30 % o 50 % del aforo del negocio "hace muy difícil que (los empresarios) tomen la decisión de abrir y la mayoría no lo hará", según el presidente de la Asociación Turística del Valle del Aragón (ATVA), Luis Terrén, para el que además la apertura de los establecimientos "no tiene mucho sentido hasta que no sea posible circular entre provincias, porque muchos de los visitantes son de otros territorios".

"Cuando se permita el tráfico interprovincial, vendrá gente de segunda residenciay eso permitirá trabajar un mínimo durante el verano, pero tampoco sabemos cómo responderá el cliente: si acudirá a los restaurantes y seguirá haciendo actividades de ocio", continuó el también alcalde de Villanúa, donde hay 450 vecinos y 2.300 viviendas de segunda residencia.

Según Luis Terrén, "lo fácil es caer en el pánico y el pesimismo" dentro del sector turístico, cuando desde las instituciones públicas y las empresas "hay que tirar del carro" y "emplear la imaginación" con el objetivo de "ofrecer un mínimo de actividad en los valles para que la gente se encuentre con un destino completo".

En el caso de Villanúa, se trabaja con la esperanza de volver a abrir tanto la Cueva de las Güixas, como el Ecoparque El Juncaral en torno al 25 de junio, en cuanto concluya la cuarta y última de las fases de la desescalada que anunció el Gobierno. "Para mediados del mes de julio ya esperamos cierta ocupación y creemos que septiembre permitirá recuperar una parte de lo perdido entre mayo y junio. Está claro que no habrá grandes eventos, pero queremos hacer algunas pequeñas actividades", concluyó el alcalde.

Los hosteleros del Alto Gállego también se preparan para recibir al turismo, siguiendo las medidas de seguridad "y a la espera del protocolo que se está preparando que es el que va a marcar por dónde van a ir los tiros. Nos sentimos casi obligados a adelantarnos a lo que va viniendo aunque por ahora no vamos a abrir, está claro", explicó Joaquín Rincón, director del Hotel Viñas de Lárrede.

Apuntó que la apertura podría ser en la segunda quincena de junio "siendo optimista", y explicó que el 40 por ciento de sus clientes son extranjeros. "Con esos no contamos, de aquí a agosto todos han cancelado, y el turismo nacional empieza tímidamente a hacer reservas. Además ahora la movilidad entre provincias no es posible", recodó.

Están trabajando en colocar mamparas en recepción, espaciar las mesas del comedor, en las zonas interiores máquinas de ozono desinfectarán los espacios, y las exteriores "se fumigarán con productos desinfectantes, y a la entrada del hotel habrá geles".

En los mismos términos se explicó Anabel Costas, del Hotel El Privilegio de Tena. "Vamos a reducir aforo en la terraza, el comedor y las zonas comunes. Desaparece el bufet libre de desayunos y se personalizan en las mesas de los clientes, mejoramos los protocolos de limpieza y desinfección, desaparece la barra del bar y serviremos al cliente la consumición en los sofás o en la terraza. Esto lo veníamos haciendo, y el pago será con tarjeta o por transferencia, además intentaremos pedirles todos los datos de manera digital para que aquí no tengan ni que enseñar el DNI".

En Ribagorza y, en especial, en el valle de Benasque, quieren ser "optimistas" y buscar las fortalezas de la zona ante esta situación de crisis sanitaria. La despoblación y el vasto entorno natural, de gran belleza en prácticamente todo el territorio, son las bazas para un sector turístico que mira con prudencia el mes de junio y se centra, sobre todo, en el momento en que se recupere la movilidad interprovincial.

El presidente de la Asociación Turística y Empresarial Valle de Benasque (ATEVB), José María Ciria, comentó que la mayoría de los establecimientos turísticos esperará a que la desescalada permita la circulación entre provincias. "La mayoría de nuestros clientes son de Zaragoza, Barcelona, Madrid o Valencia así que la mayoría esperarán porque dependemos de la gente de fuera".

La apertura, aseguró Ciria, será cuando estén definidos los protocolos sanitarios. "Estamos esperando la normativa, pero mientras vamos avanzando con instalación de máquinas de ozono y otras medidas", detalló, avanzando que la inmensa mayoría no se plantea abrir hasta mediados o finales de junio.

La promoción, que reforzará la propia Comarca de la Ribagorza, será fundamental de cara a la campaña estival. "Vamos a ser optimistas porque tenemos un gran destino con muchos espacios abiertos, sin aglomeraciones, con naturaleza y aire limpio", recordó Ciria, quien aventuró un arranque lento de la campaña estival. "Es algo nuevo, así que el principio será flojo, pero esperamos que al final se reactivará el verano, sobre todo, la segunda quincena de julio y en agosto", concluyó.

La Asociación de Empresarios de la Sierra de Guara demanda "flexibilidad y concreciones" ante la fase de "desescalada" que afectará a cerca de 115 empresas asociadas, en su mayoría en turismo de aventura, restauración y hostelería, según informó la presidenta Laura Ventura, propietaria de una empresa.

"La gente está pendiente de conocer los protocolos concretos en algunas materias que implican las condiciones sanitarias y también las económicas porque hay empresas que tienen ERTE y bastantes, no tienen ayudas", señaló a este periódico.

En la misma línea manifestó que "es imposible o difícil, hacer números sin tener información y las cuentas no salen con estimaciones. En la práctica, todas las empresas están afectadas por la situación de crisis, algunas se quedarán por el camino o saldrán muy tocadas".

En base a las primeras medidas, los indicativos son "negativos para abrir algunos establecimientos porque los ingresos, por plazas autorizadas, no cubren las expectativas ni los gastos".

En cuanto a las indicaciones de la Administración para la apertura en la fase de "desescalada", señaló que "hay variedad de opiniones pero es evidente que dos meses no salvan la temporada en Guara. Por lo menos, se reciben llamadas para interesarse por posibles reservas entre julio y agosto, algunas permanecen desde la fase previa a la crisis pero, en general, no se sabe con certeza qué pasará porque hay variedad de negocios".

De todas maneras "saldremos adelante y somos positivos porque Guara Somontano es un destino cualificado, sostenible y seguro con el patrimonio que tenemos. En ese sentido no hay nada que inventar porque la naturaleza que nos avala sigue ahí y ha sido el mejor aval para creer en nuestras posibilidades".

Y explicó que "los vecinos del territorio siempre han superado las dificultades por falta de servicios y otros aspectos para seguir adelante".

Se refirió a la redacción del Plan de Desarrollo Turístico del Valle de Rodellar, que impulsan Comarca de Somontano y Ayuntamiento de Bierge, para marcar las estrategias de inversiones y promoción en el horizonte de 4 años. Por último informó de que no hay previsiones de apertura para la temporada de baños en el salto de Bierge.