Aragón

ALTO ARAGÓN - GANADERÍA EXTENSIVA

Reclaman medidas concretas para retirar al oso Goiat del Pirineo de Huesca

Las organizaciones agrarias Asaja, Uaga, UPA y Araga valoran la petición del consejero Olona

Reclaman medidas concretas para retirar al oso Goiat del Pirineo de Huesca
Reclaman medidas concretas para retirar al oso Goiat del Pirineo de Huesca
M.P.

HUESCA.- Las organizaciones agrarias de Asaja, Uaga, UPA y Araga reclaman medidas concretas para la retirada del oso Goiat del Pirineo después de que el consejero aragonés de Agricultura, Joaquín Olona, volviera a dirigirse al Ministerio para la Transición Ecológica y a la Generalitat para pedir que se aplique el protocolo para plantígrados problemáticos, tras los sucesivos ataques a explotaciones de ganadería intensiva en el Pirineo en el mes de abril. En cualquier caso, reiteran que es "imposible" la convivencia del oso y el lobo con la ganadería de la provincia.

El responsable de la junta de ganadería extensiva de Asaja Huesca, Ramón Solanilla, ha mostrado su satisfacción por que "las administraciones empiecen a darse cuenta de que no es compatible la ganadería extensiva con estos depredadores". Y respecto a las declaraciones del consejero Olona sobre la petición para retirar a Goiat reivindica "que estas voluntades políticas se conviertan en hechos".

Para Solanilla, lo importante en este momento es que el consejero Olona "pase a los hechos. Tenemos que saber respecto al oso Goiat cuál es la administración (Generalitat de Cataluña o el Gobierno central) que tiene que hacerse cargo de sacarlo del territorio".

Asimismo, el responsable de ganadería extensiva de Asaja Huesca reclama "que las administraciones españolas pasen informaciones a los ganaderos de la situación del oso en tiempo real". De este modo, "se podrían evitar la mayor parte de los daños".

Para Solanilla, "lo que no puede ser es que los ganaderos estén en contacto con ganaderos franceses y les estén pasando datos del oso".

Apunta que las ayudas por los daños por las reses muertas como consecuencia del ataque del oso "se ha demostrado que son insuficientes para los ganaderos que las han solicitado".

En su opinión, "los ganaderos tienen que percibir el precio del animal que sufre los daños y la administración debería ser más flexible a la hora de reconocer los daños donde ha habido un siniestro y más con uno de estos depredadores como el oso y el lobo".

Por parte de Uaga, su secretario general José María Alcubierre, aboga por "hacer un estudio más profundo de lo que están aportando medioambientalmente el oso y el lobo en nuestro territorio y lo que ha aportado históricamente la ganadería extensiva". A su juicio, "la balanza se inclina de una forma infinitamente superior a favor de la ganadería extensiva".

Además de la presencia del lobo y el oso, Alcubierre añade otros problemas que sufre este sector ganadero como la falta de cabaña ganadera y de relevo generacional así como los problemas de costes y precios.

En el caso del lobo y el oso, indica que su presencia "está generando un trauma al sector que puede poner en peligro la gran labor de la ganadería extensiva en nuestro territorio, tanto medioambiental como de protección de incendios y biodiversidad, después de miles de años de permanencia de la actividad".

Por ello, considera que la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón "tiene que dar pasos para aportar" respecto al valor de la ganadería extensiva.

Del mismo modo, comenta que "el Estado español tiene que empezar a trabajar para retirar a los grandes carnívoros del Pirineo".

Y respecto a las subvenciones por los daños al ganado, el responsable de Uaga en la comunidad explica que "no se centran realmente en el problema y esto ha dado la razón a nuestra organización, al ver cómo los afectados no podían cobrar las ayudas".

Asimismo, Alcubierre añade que a este hecho se suma la "falta de políticas agrarias" que perjudican al sector de la ganadería extensiva.

Por parte de UPA, su secretario general en Aragón, José Manuel Roche, deja claro que "la convivencia del oso y la ganadería extensiva es imposible" por lo que aboga por "capturarlos y llevarlos fuera de la comunidad autónoma".

A su juicio, la presencia de estos depredadores ha llevado consigo "un cambio brutal en el manejo del pastoreo tradicional y medidas de protección así como una tensión en los ganaderos muy importante por la incertidumbre e inquietud que nos genera la presencia de los lobos y los osos" en la provincia.

En relación a la situación que padecen los ganaderos indica que estos "no quieren ayudas sino que desaparezca el oso y el lobo y poder seguir haciendo su labor".

Desde UPA, valoran que el consejero Olona dé la razón a los ganaderos acerca de que la convivencia con el oso es difícil y que se haga cargo de él a quien le competa".

Para el presidente de Araga, Jorge Valero, "existe una normativa para evitar que entren en los territorios especies no autóctonas y ni el oso esloveno ni el lobo italiano son autóctonos de Aragón".

Por ello, incide en que "la propia ley obligaría a la administración a capturarlo, cazarlo o llevarlo a otro sitio como especie exótica invasora que han traído y han soltado aquí con intención".

En este sentido apunta a que la administración autonómica "está mirando para otro lado" en relación a la introducción de animales alóctonos. "Los osos eslovenos no son ibéricos sino que son reintroducciones de especies no autóctonas y deberían estar tan prohibidas como la trucha arco iris o el siluro", comenta.

Respecto a las ayudas o indemnizaciones por la ganadería afectada por los ataques del oso o del lobo, critica la complicación burocrática para su tramitación, que tilda de "farragosa y liosa al ser inoperantes" y que, en opinión de Valero, "ha creado la propia administración".

Para el responsable de Araga, "el problema de todo esto es que no tendrían que ser unas ayudas sino una compensación por daños sufridos o indemnización", en relación a las ayudas del Gobierno de Aragón del año 2018 mediante la cual los ganaderos pueden acogerse a las ayudas hayan sufrido o no un ataque sus reses.