Asociación Aragonesa de Ganaderos de Bovino de Raza Pirenaica: "El consumo de estas razas ayuda al mantenimiento del medio rural"

SABIÑÁNIGO.- La Asociación Aragonesa de Ganaderos de Bovino de Raza Pirenaica (Asapi) lleva muchos años colaborando en diferentes proyectos de investigación con el objetivo de saber en qué parámetros de calidad se mueve esta raza, para una vez tipificado, poder utilizarlo como un criterio más en la mejora.

Cuando empezó el estado de alarma por la covid-19, el Ministerio de Agricultura "nos envió notificación y nos paralizó todas las actividades zootécnicas de cría y de control de rendimiento de los libros genealógicos. Durante el confinamiento estuvimos informando a los ganaderos sobre las nuevas estrategias en temas de genética y haciendo mucho hincapié en la importancia de renovar las ganaderías con animales de potencia genética alta. Sin perder ese punto productivo y manteniendo rusticidad y facilidad de parto, íbamos viendo qué novillas eran las mejores", explica Laura García Pastor, veterinaria y secretaria técnica de Asapi.

Añade que las asociaciones "no solamente estamos para mantener una raza sino también para mantener un ganadero y una ganadería para que ésta sea productiva".

Durante el confinamiento, Asapi, en la línea de divulgación y de visibilidad de la raza, ha trabajado en renovar su página web y en potenciar sus redes sociales "para acercarnos más hacia el consumidor y hacer una página web más atractiva tanto para este como para el ganadero, ya que nuestro futuro va a depender un poco del consumidor". Asimismo, desde el año pasado está trabajando con un grupo de cooperación en programas de Desarrollo Rural bajo la denominación "Vacuno de Aragón, consumo sostenible".

Explica Laura García que con dicho grupo tenían previstas para estos meses varias acciones que han tenido que cancelar, como degustaciones o jornadas para ganaderos. "Y queríamos hacer una jornada de ganadería ecológica, que la retomaremos el año que viene porque estamos viendo que el consumidor está demandando mucho el producto ecológico".

El año pasado el Ministerio de Agricultura les autorizó el sello de Raza Autóctona 100%, y este año han conseguido la marca propia Roya Pirenaica. Esta carne ahora va etiquetada con dos sellos y lleva el eslogan del grupo de cooperación: Descubre lo que comes, consume origen.

En cuanto a la asistencia a ferias, apunta que se cancelaron las de Épila y Puente la Reina, "y la de Sariñena también nos han dicho que se ha anulado. No sabemos qué va a pasar con el resto de ferias de septiembre".

Sobre el futuro de las razas autóctonas, Laura García apunta que éstas deben defender su producto, la forma de cría y su producción sostenible. "Tenemos que ser capaces de informar al consumidor de que estas razas están ligadas al territorio, y su consumo ayuda al mantenimiento del medio rural y la biodiversidad. Esa diferenciación nos dará un reconocimiento y un valor añadido a los ganaderos de estas razas".

Y añade que el consumidor va cambiando sus hábitos "y da prioridad a un producto más natural y de cercanía, siendo a su vez consciente de la importancia del sector ganadero como suministrador de alimentos durante el estado de alarma. Creo que las razas se mantendrán si el consumidor las elige, si no, no vamos a poder mantener ninguna raza autóctona", concluye Laura García.

Por su parte, el presidente de Asapi, Luis Lascorz, dice que en el confinamiento "la gente se ha informado más sobre el producto que consume, en este caso la carne de vacuno. Y creo que noticias que nos perjudican como que las emisiones de CO2 de este sector afectan al impacto medioambiental se han caído. La ganadería extensiva está aprovechando unos recursos que también contaminan".

Lascorz señala que gracias al confinamiento "la gente se ha informado y está buscando productos con identidad, productos de referencia, de venta directa, productos que tengan detrás no una gran multinacional sino personas, ganaderos. Con esto se nos abre una posibilidad de ofrecer al consumidor y de ser más visibles".