Aragón

ALTO ARAGÓN - REBROTE DE CORONAVIRUS

El Bajo Cinca vive con preocupación la propagación del coronavirus

El centro de salud de Fraga ya ha realizado unos 400 test PCR y la cifra va a más

El Bajo Cinca vive con preocupación la propagación del coronavirus
El Bajo Cinca vive con preocupación la propagación del coronavirus
R.G.

FRAGA.- Decía Joan Manuel Serrat en una de sus canciones que "uno de mi calle me ha dicho que tiene un amigo que dice conocer a un tipo que un día fue feliz". Y así se podría seguir hasta el infinito de contactos. Esto es un poco lo que está pasando ahora mismo en la comarca del Bajo Cinca con el brote de coronavirus que se ha producido en una empresa frutícola de Zaidín, Frutas La Espesa, que cuenta con más de 200 trabajadores muy repartidos por muchas localidades de las tres comarcas que han "reescalado" a fase 2.

Eso implica muchos contactos y muchos positivos más. Ya se están haciendo pruebas PCR a personas que trabajan con el novio de una chica que tiene una amiga cuyo hermano trabaja en la empresa. Y ya han dado positivo en estas pruebas hasta alguna persona que comparte la afición a salir en bicicleta los domingos, con un directivo de la empresa.

A partir de ahí, cada caso irradia a su entorno familiar, laboral y de amistades, obligando a multiplicar las pruebas y los aislamientos. Por ahora, el equipo de Atención Primaria del Centro de Salud de Fraga lleva realizadas unos 400 test PCR, más los 200 que se hicieron en la propia empresa y los que se han hecho en Monzón y Binéfar, el número se va prácticamente a los 800.

Por ahora se han confirmado unos 140 casos, pero la sensación es que el número superará los 200 en esta "fase ascendente de la curva", como indicó el pasado martes el director general de Salud Pública. De hecho, en los datos aportados este miécoles, todavía no se incluían todos los test del pasado domingo.

La responsable de Enfermería del centro fragatino, María Pilar Albas, asegura que "los contactos crecen exponencialmente y hay que ser rápidos y hacer muchas pruebas para detectar los positivos y llegar a poder atajar la transmisión, pero es complicado". Resalta el trabajo intenso que se está realizando en el centro de salud fragatino, "salimos a ochenta pruebas diarias y hay que atender a los usuarios que vienen por otros motivos. Hay que tener en cuenta que a cada positivo nuevo, los rastreadores les hacen encuestas para trazar los contactos en que no se han cumplido las medidas de protección". La noticia positiva, ahora mismo, es que los casos no revisten gravedad, no hay ingresos hospitalarios, y por lo tanto no hay riesgo de colapsar el sistema sanitario. De hecho, la inmensa mayoría son asintomáticos. Eso sí, ahora mismo es casi imposible saber las personas que están aisladas en sus domicilios.

Las autoridades, todas, no cesan en sus llamamientos a la responsabilidad ciudadana, a mantener las medidas de distancia, protección e higiene.

Algunos circunscriben los casos a la actividad agrícola, aunque no se debería banalizar el tema y reducirlo a un problema de "temporeros y campaña frutícola", ya que muchos positivos no son temporeros y preocupa más la situación en el interior de los almacenes que en los campos de fruta al aire libre. Las empresas se han esforzado por establecer planes de contingencia y por adoptar las medidas necesarias para evitar contagios y en este sentido, La Espesa ha cumplido.

A partir de aquí, solo cabe insistir como hace la alcaldesa de Fraga, Carmen Costa, dirigiéndose sobre todo a los jóvenes: "Cuidado con las fiestas en las casas de las huertas y los montes. Ya habrá tiempo. Ahora no toca".