"La producción de miel ha caído un 60 % por el cambio climático"

HUESCA.- La producción de miel de romero y tomillo ha caído en torno al 60 por ciento en la primavera pasada en la provincia, debido tanto al frío como al calor temprano, que el apicultor del Casteflorite y responsable estatal del sector en Uaga-Coag, Pedro Loscertales, atribuye en su mayoría al cambio climático, y al ácaro Varroa.

Con esta situación, los apicultores esperan "con expectativa" la campaña de este verano entre junio y noviembre, aunque también lamenta que las variaciones de temperatura y de humedad no ayudan a la producción de miel. "El cambio climático lleva consigo la bajada de rendimientos de la producción y la falta de vigor en la colonia al no tener el aporte proteico suficiente", explica.

Por otro lado, los precios se encuentran por debajo de los costes de las explotaciones, lo que no ayuda a los apicultores a rentabilizar su trabajo. De este modo, reclama que se modifique la Ley de la Cadena Alimentaria para valorizar al sector.

Las consecuencias por el estado de alarma por la covid-19 han llevado consigo un desplome de la venta al detalle en zonas turísticas, que cifró en torno al 90 por ciento, mientras que en el resto la pérdida de ventas se sitúan entre el 50 y 60 por ciento.

Respecto a la avispa asiática, indica que se han detectado nidos puntuales en la comarca de la Ribagorza y en el valle de Hecho. "Reclamamos que se hagan controles en esas zonas para ver si la avispa asiática acaba de entrar en la provincia", comenta.

El responsable estatal Uaga-Coag en apicultura subraya la labor polinizadora de la abeja y como bioindicadora del cambio climático en función de sus patrones de comportamiento.

FALTA DE PROFESIONALIZACIÓN

Actualmente la provincia de Huesca cuenta con 43.000 colmenas y 400 apicultores de los que solo un 5 por ciento son profesionales.

En su opinión, la falta de profesionalización en el sector se debe a "la falta de rentabilidad y rendimientos" de la apicultura.

Por ello, estimó que la solución pasa por una mayor estabilidad en precios así como un incremento de la formación específica en apicultura a partir de labores de las Escuelas de Capacitación Agraria.