Aragón

DOMINGO - COSAS DE CASA

Los Condes de Ribagorza coronan Benabarre

Declarado Bien de Interés Cultural, el conjunto de la iglesia y los muros del castillo pueden visitarse

Los Condes de Ribagorza coronan Benabarre
Los Condes de Ribagorza coronan Benabarre
E.F.

La silueta de la iglesia y los muros del castillo de los Condes de Ribagorza coronan Benabarre desde un altozano y se alzan como emblema de la capital cultural ribagorzana. Declarado Bien de Interés Cultural (BIC), el conjunto puede visitarse tanto por libre como en visita guiada y, ocasionalmente, como el pasado viernes, disfrutando de un espectáculo complementario a la visita guiada nocturna a base de "farsas y juglarías".

Los orígenes del castillo de los Condes de Ribagorza se remontan a finales del siglo X o principios del XI. En esa época, Benabarre y su entorno estaban bajo dominio musulmán. El antiguo lugar fortificado llamado Ibn Awar fue conquistado por el rey aragonés Ramiro I a finales del 1062. De esa época data la defensa perimetral del cerro en que se asienta el castilllo, con cubos de muralla de sección rectangular.

El Castillo de Benabarre pasó a ser residencia condal y su iglesia románica se transformó en un imponente templo gótico. En el año 1062, Benabarre fue conquistada por el rey Ramiro I, quién mando edificar un castillo, al objeto de asegurar la posición en una frontera todavía inestable. Con el paso de los años, se construyó una iglesia de estilo románico.

La sociedad cristiana fue asimilando la herencia del mundo islámico, que se hizo palpable en el desarrollo de los espacios comerciales como plazas y porches.

La villa se convirtió en capital ribagorzana cuando, en 1322, Jaime II decidió otorgar el título de conde de Ribagorza a su hijo Don Pedro de Aragón. El infante Pedro restauró el Condado de Ribagorza localizando su centro de poder en Benabarre.

En 1596, fue derogado e incorporado a la corona por Felipe II. A finales del primer tercio del siglo XVII, el castillo se mandó rehacer, ante el advenimiento de la Guerra de Secesión Catalana (1636-1656); amén de ser la capital del condado de la Ribagorza.

Las guerras con Cataluña, la Guerra de Sucesión Española (1707-1714), la Guerra de la Independencia y las Guerras Carlistas dejaron el castillo de Benabarre convertido en ruinas.

En el siglo XIX, se transformó en un fuerte fusilero: los muros se estrechan y se elevan, para adaptarlos al armamento ligero que se usaba entonces.

En el último cuarto del siglo XIX, los restos de la iglesia gótica, que había sido parcialmente desmontada medio siglo antes para construir la actual iglesia parroquial, fueron adaptados como pabellón militar dotándola de dos pisos y trasladando el arco del coro al piso superior.

Los restos del Castillo son en realidad la superposición de tres recintos fortificados, dos iglesias y una cisterna.

Entre sus usos, desde la Oficina de Turismo de Benabarre, constatan el de un campanario, un cementerio, huertos, albergue para pobres, torre de vigilancia aérea y monumento.

Podemos decir, concluyen, que el castillo de Benabarre es un auténtico archivo en piedra que permite arrojar luz sobre la historia de la zona.

El Castillo pasó a ser propiedad municipal en 1922. A principios de los 90, se realizaron diversas intervenciones en el Castillo a través de campos de trabajo, y se reconstruyeron torres y muros con profesionales.

El proceso de recuperación y adaptación como monumento empezó en 1991 y se prolongó durante 20 años. En el pasado 2011, se inauguró como Bien de Interés Cultural y, desde entonces, está abierto a las visitas turísticas.

VISITAS TURÍSTICAS

El Castillo de Benabarre puede visitarse de martes a domingo de 10 a 14 y de 17 a 20 horas. Además, se ofrecen visitas guiadas con acceso al mirador a las 12 y las 19 horas. En temporada alta, del 20 de junio al 15 de octubre, las tarifas son: 2 euros la entrada al castillo, 4 euros la entrada al castillo más la visita al mirador y gratis para visitantes de entre 0 y 11 años y empadronados en Benabarre.

Durante el verano, los viernes hay visitas guiadas nocturnas al castillo de Benabarre. En julio, la última fue el pasado viernes y las siguientes, ya en el mes de agosto, están previstas los días 7, 14 y 28, en todos los casos con salida a las 22 horas desde la plaza Mayor de Benabarre.

El precio es de 2 euros salvo que, como el pasado viernes, se cuente con espectáculo complementario, en cuyo caso asciende a 5 euros y el aforo, dadas las circunstancias sanitarias, es limitado.