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Aragón flexibiliza las restricciones en las residencias de mayores

La autorización para salir y la flexibilización de las visitas ayudarán a la "estabilidad emocional" de las familias, según María Victoria Broto

Residencias de mayores
Residencia de mayores.
EFE

El Gobierno aragonés ha tomado la decisión de flexibilizar las restricciones que afectaban a las residencias de mayores de la Comunidad desde el inicio de la pandemia de la covid, a la vista de la evolución positiva de los datos de contagios una vez prácticamente completado el proceso de vacunación en estos centros.

Así lo ha anunciado este jueves en rueda de prensa la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales del Ejecutivo regional, María Victoria Broto, para quien las medidas adoptadas -autorización para las salidas de las residencias y flexibilización de las visitas-, serán positivas para la "estabilidad emocional" de las familias.

La consejera ha destacado que con los residentes que decidieron no vacunarse se mantendrán las restricciones actuales, a la espera de que el proceso de inmunización alcance a la mayoría de la sociedad.

Los datos de evolución de la pandemia en las residencias tras suministrarse las dos dosis de las vacunas, con 26 brotes que afectan a 415 residentes y 97 trabajadores, la mayor parte (97,2 %) concentrados en diez centros, han abierto la posibilidad de flexibilizar las restricciones, todas consensuadas con Sanidad y Salud Pública.

En relación a este punto, la consejera ha recordado que el pasado 23 de diciembre se contabilizaban 40 brotes en residencias que afectaban a 1.118 residentes y a 343 trabajadores, una prueba, ha subrayado, de que la vacuna "ha dado sus frutos".

Las nuevas medidas han sido detalladas por el secretario general técnico del Departamento, José Antonio Jiménez, quien ha recordado que hasta ahora estaban prohibidos los accesos a los centros y sólo se autorizaban las salidas temporales por un periodo mínimo de diez días, con la obligación de someterse los internos a aislamiento a la espera de los resultados de una PCR.

A partir de ahora, los internos vacunados podrán salir a domicilios de una única unidad de convivencia por el periodo temporal que decidan, y no será necesario su aislamiento al regreso ni pruebas de PCR si el tiempo no supera los diez días.

Además, a estos residentes inmunizados se les levanta la restricción de una única visita semanal y podrán recibirlas con una mayor periodicidad y en grupos de hasta cuatro personas, aunque deberán llevarse a cabo en el exterior o en espacios acondicionados para ello, así como con cita previa.

Jiménez ha precisado, sin embargo, que estas medidas se implementarán de forma progresiva, en función de la capacidad organizativa de cada centro.

Los centros recibirán una notificación en breve para que apliquen las nuevas medidas "en cuanto se pueda", mientras que la orden que las avala tardará en publicarse unos días.

"Después de un tiempo, por primera vez sonreímos, aunque las mascarillas no lo dejen ver", ha enfatizado Broto, quien ha anunciado, a la vista de la evolución positiva de los datos, el cierre de los centros covid de Ejea de Albarracín y Yéqueda y el mantenimiento provisional del de Casetas.

Según ha explicado, en la actualidad hay 14 residentes hospitalizados y 18 en centros covid, frente a los 81 hospitalizados y 64 ingresados en estos centros que se contabilizaban el pasado 23 de diciembre.

En cualquier caso, ha subrayado, estos dos centros permanecerán a la espera de su readaptación para volver a abrir como residencias para mayores.

La consejera ha explicado, por otra parte, que las nuevas medidas permitirán incrementar el número de personas ingresadas en las residencias de la Comunidad, 2.274 desde el inicio de la pandemia.

Hasta ahora, ha añadido a este respecto, el confinamiento y situación de estos centros había llevado a las personas mayores y a sus familias a retrasar su decisión.

Ha insistido en que la evolución de los datos han puesto en evidencia que la vacunación es el "único instrumento" para frenar los contagios, y ha destacado que desde el inicio de proceso de inmunización el número de trabajadores de residencias no vacunados ha descendido del 18 % al 12 %.

En la actualidad hay 400 residentes no vacunados, un 3 % de la población actual de mayores internos en centros en Aragón.

Los residentes y trabajadores no vacunados podrán, sin embargo, comunicar en cualquier momento a sus centros de salud de referencia un cambio de decisión respecto a las vacunas, para ser incluidos en la planificación.

La consejera se ha referido también al inicio, la próxima semana, del proceso de vacunación de los grandes dependientes en sus domicilios, aunque ha precisado que la decisión de vacunar a una de las personas encargadas de su cuidado depende del Departamento de Sanidad.