Aragón
En colaboración con DPH

25 años premiando a quienes cuidan y protegen el territorio

La Diputación Provincial de Huesca celebrará, el próximo mes de febrero, la XXV edición del Galardón y Premios Félix de Azara, máximas distinciones en materia medioambiental.

Pastor en Lenito, en el valle de Echo.
Pastor en Lenito, en el valle de Echo.
Sergio Padura

Reconocer el trabajo y el esfuerzo de quienes contribuyen a preservar el el medio rural. Con ese objetivo nacieron, hace 25 años, los premios Félix de Azara, puestos en marcha por la Diputación Provincial de Huesca, que durante este tiempo ha reconocido la labor de las personas, colectivos, empresas e instituciones que han desarrollado proyectos en materia medioambiental y fomentado el uso sostenible de los recursos naturales y su preservación.

En febrero de 2023 se celebrará la entrega de premios en la que, coincidiendo con este aniversario tan especial, se recordarán a los todos los premiados y galardonados -el primero fue el habitante de L’Estall, en la sierra del Montsec, en la parte más oriental de la provincia de Huesca- y otorgará un nuevo reconocimiento a los pastores y pastoras de la provincia oscense, dada su aportación económica, cultural y ambiental al territorio. La ganadería extensiva es un motor esencial en la zona, ha modelado y vertebrado el paisaje y ha hecho posible el mantenimiento de la biodiversidad en el Alto Aragón, siendo un elemento fundamental en la prevención de incendios forestales y en la conservación del entorno. 

Además de este premio, bajo la denominación Félix de Azara se reconocerá el trabajo de otros colectivos y personas -más de 250 en sus 25 años de trayectoria- cuya labor ha contribuido al cuidado, mantenimiento y difusión del medio natural de la provincia. En esta edición, se han registrado cerca de 90 candidaturas: 44 para el Premio internacional de Fotografía 'Dávid Gómez Samitier'; nueve proyectos en la categoría escolar; 10 en la de medios de comunicación; cinco en la de entidades sin ánimo de lucro; tres en la de empresa; cinco en la de becas de investigación y diez en la de ayudas a la edición.

El pastoreo, una forma de vida

Los pastores y ganaderos oscenses se agrupan en una docena de asociaciones en el Alto Aragón, entidades que defienden la conservación de esta profesión a la vez que se adapta a las necesidades y demandas de la sociedad moderna.

El pastoreo es una forma de vida heredada que, desde sus inicios, ha contribuido al territorio, y no solo por ser un agente que ha mantenido limpio el entorno natural: la trashumancia ha generado rutas y senderos que hoy se han establecido como recorridos turísticos; porque bordas, mallatas y cabañeras han generado un patrimonio arquitectónico único; y porque el trabajo generado, tanto pastores como esquiladores ha contribuido a que más gente se establezca en entornos rurales. En este contexto, resulta esencial también destacar el papel de la mujer, cada vez más protagonista en esta profesión y vital para su futuro y el de los pueblos.

Con la entrega de este galardón a la ganadería extensiva se reconoce su labor como generador de una economía sostenible, así como de la producción de alimentos de proximidad, ricos y sostenibles y de su capacidad para asentar población en la zona rural.