Comarcas

OPERACIÓN DE LA GUARDIA CIVIL

Decomisados 29 canales de jabalí en La Litera que iban a comercializarse sin cumplir con las normas sanitarias

Se almacenaban en una explotación agrícola que no contaba con las mínimas condiciones higiénicas

Imagen de la operación del Seprona.
Imagen de la operación del Seprona.
Guardia Civil

El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Huesca, el Seprona ha intervenido un total de 29 canales de jabalí almacenados en pésimas condiciones en una explotación agrícola de la comarca de La Litera. La operación tuvo lugar el pasado día 21 de este mes, en el marco de una investigación para el control de actividades irregulares en la recogida, transporte y comercialización de carne de caza, 

Como explican fuentes del cuerpo de seguridad, los agentes del Seprona hallaron las piezas de carne durante una inspección a la citada finca agrícola en la que se incumplían, como pudieron constatar, "las más elementales condiciones higiénicas" para el almacenamiento de carne caza. Las piezas habían sido abatidas, supuestamente, ese fin de semana en diferentes cotos de caza de la provincia y se encontraban "en un lamentable estado de conservación", por lo que se solicitó la presencia de un veterinario del Servicio Provincial de Sanidad del Gobierno de Aragón, que levantó acta de la inspección.

Los animales, señalan desde la Guardia Civil, "habían sido eviscerados completamente habiéndose deshecho de las vísceras en el campo, a fin de ser alimento para animales carroñeros y no quedar evidencias de ellas". Según la legislación vigente en Aragón, recuerdan desde el cuerpo de seguridad, las vísceras rojas (corazón, pulmón, etc…) deben extraerse bajo supervisión de un veterinario y se deben conservar de manera individual en un contenedor perfectamente etiquetado acompañando al animal con la misma identificación.

El transporte de estas canales hasta la empresa destinataria, ubicada en Soria, se realizaba bien directamente en un vehículo de la propia empresa en las instalaciones de la sociedad de cazadores o bien eran recogidos la citada explotación agrícola, donde eran almacenadas hasta su recogida para su traslado la planta soriana.

Los agentes junto con el veterinario comprobaron que las canales se encontraban almacenadas tanto en vehículos estacionados dentro de la citada explotación agrícola, sin ningún control de temperatura, algunos de ellas sin refrigeración y otros, apuntan los agentes, "incluso estaban depositados en el suelo de tierra tapadas con una lona".

Las canales, señalan desde la Guardia Civil, iban a ser transportadas, supuestamente, a una empresa para su procesamiento y transformación en productos destinados al consumo humano, incumpliendo así la carne intervenida "los requisitos que exige la normativa de Aragón para garantizar las condiciones higiénico-sanitarias y de trazabilidad".

Tras determinar el veterinario de la DGA que la carne no era apta para el consumo humano, fue entregada para su destrucción en un centro de tratamiento autorizado y el Seprona formuló diferentes denuncias en base a la normativa sanitaria y de protección del consumidor que han sido remitidas al Servicio Provincial de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, informando igualmente de lo actuado a la Fiscalía de Medio Ambiente de Huesca.