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Complicado rescate de un espeleólogo a 50 metros de profundidad en Villanúa

La intervención se produjo el viernes por una caída en la cavidad de Aven de Marañán

Imagen durante el rescate  del espeleólogo
Imagen durante el rescate del espeleólogo
G.C.

Especialistas del Sereim de la Guardia Civil de Jaca rescataron el viernes pasado a un espeleólogo zaragozano, de 38 años, que se había lesionado a 50 metros de profundidad al sufrir una caída en la cueva Aven de Marañán, en el término municipal de Villanúa.

Según informaron de la Benemérita de Huesca en un comunicado de prensa, el aviso se recibió a las 15 horas e indicaba que un espeleólogo había sufrido una caída hasta el suelo, rodando posteriormente unos cinco metros por una fuerte pendiente de bloques y cantos. Como consecuencia, el accidentado presentaba un fuerte dolor en el pie y el costado que le impedían salir de la cueva por sus propios medios.

Hasta el lugar acudieron componentes del Sereim de la Guardia Civil de Jaca con material para socorro pesado en el helicóptero de la Guardia Civil de Huesca y médico del 061 para una primera intervención y valoración, que precisaron de más personal para las labores de evacuación.

Para extraer al accidentado, el equipo de rescate instaló dos contrapesos encadenados, uno primero del pozo de 50 metros y otro para extraerlo hasta el exterior de unos 15 metros.

Acto seguido, un médico y un especialista descendieron hasta el herido. A las 19:30 horas lograron llegar a la boca de la cueva y el helicóptero lo trasladó hasta el Hospital San Jorge de Huesca. El accidentado sufría un posible esguince de tobillo izquierdo, así como contusiones en el costado y omoplato derechos.

El mismo viernes, el Sereim auxilió a un vecino de Navarra, de 45 años, que había sufrido una caída de diez metros tras fallarle los seguros que había colocado mientras se encontraba escalando el pico Achar del Álamo (Ansó). Al final, fue evacuado del lugar en helicóptero hasta el Hospital San Jorge de Huesca.

Y el sábado, especialistas del Ereim de Huesca auxiliaron a un barranquista francés de 57 años que se había lesionado un hombro mientras descendía el Fornocal, situado en el municipio de Colungo.