Comarcas

ALTO ARAGÓN / SECTOR AGROALIMENTARIO

La producción de almendra cae un 50% por las heladas de abril

ASAJA, UAGA y UPA denuncian los bajos precios, en torno a los 3,5 euros el kilo

Labores de recolección de la almendra en Novales, durante esta campaña.
Labores de recolección de la almendra en Novales, durante esta campaña.
S.E.

La producción de almendra en la provincia se ha reducido un 50 % este año respecto al 2020 por las heladas primaverales que se registraron durante los meses de marzo y abril, que mermaron las explotaciones situadas en el fondo de los valles, especialmente en las comarcas de La Hoya de Huesca, Bajo Cinca, La Litera y Ribagorza.

El responsable de frutos secos de Asaja Nacional, José María Alcácer, explicó que tras una primavera seca “las heladas desde el 20 de marzo afectaron a las variedades de ciclo medio” con un descenso de la cosecha que cifró en un 40 %, especialmente en La Litera, Bajo Cinca y Hoya de Huesca, mientras que tildó de “buena” la cosecha en el Somontano. Estas heladas, matizó, afectaron “más a las plantaciones situadas en los hondos que en altura” por lo que estimó que “los efectos han sido desiguales” en función de la orografía.

Respecto a los precios, “este año a principio de campaña se empezó por encima de los cuatro euros por kilo de almendras y ahora estamos un poco por encima de los tres euros y medio, que no cubren los costes de producción”. Una situación que de seguir así, plantea a los agricultores “arrancar las plantaciones menos rentables y volver al cereal”.

También José Luis Sánchez, responsable de frutos secos de Uaga Aragón, calificó la campaña de “atípica” por la borrasca Filomena en enero con la nieve que permaneció dos semanas tras un otoño muy seco y un febrero muy cálido que adelantó la floración. La heladas nocturnas entre el 20 de marzo y el 7 de abril afectaron a variedades como Guara, Soleta o Belona que se adelantaron y “sufrieron unas mermas enormes del 50 %, especialmente las que presentaban un tamaño de lenteja”. Desde Uaga y junto al resto de organizaciones agrarias se ha trabajado para pedir al Ministerio de Agricultura ayudas asociadas para almendra de secano en zonas desfavorecidas y de montaña.

Por otro lado, se refirió a la situación “ilógica” de los precios de la almendra, en torno a los 3,8 euros el kilo, cuando el de rentabilidad en secano se sitúa entre los 7 y 8 euros.

Por su parte, el responsable de frutos secos de UPA, Ramón Ballarín, también cifró pérdidas de un 50 por ciento de las producciones de almendra en La Hoya de Huesca y Bajo Cinca por las heladas tardías en el mes de abril. Una cosecha, explicó, “que se ha caracterizado por un menor rendimiento de la relación pepita-cáscara de la almendra, de entre un 3 y 4 por ciento menos, y que ha sido generalizado en todas las variedades”.

Achacó los precios bajos de la almendra, unos 3,5 euros por kilo, “a la escasez de la demanda por parte de los fabricantes y la presión de la almendra americana en España”.

Detalle de los trabajos mecanizados para la recolección de la almendra en el mes de octubre.
Detalle de los trabajos mecanizados para la recolección de la almendra en el mes de octubre.
S.E.

En su opinión, “la almendra es un cultivo que está en plena expansión en la provincia de Huesca, con plantaciones en grandes extensiones, variedades muy modernas, con mucha tecnología y profesionalidad de los agricultores”. No obstante, lamentó “las dos campañas seguidas de bajos precios”. Además subrayó que el regadío “tiene un peso muy importante en el almendro de la provincia a nivel nacional”.

También demandó una mayor agroindustria relacionada con la almendra en la provincia.