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ALTO ARAGÓN

El sector turístico cierra una Navidad "buena" influenciada por el coronavirus

En vísperas hubo cancelaciones de reservas aunque luego llegaron otras de última hora y se espera que este mes de enero sea mejor que el de otros años

Afluencia de esquiadores durante este sábado en las estaciones de esquí de la provinci
Afluencia de esquiadores durante este sábado en las estaciones de esquí de la provinci
Pablo Segura

Los valles pirenaicos despiden este fin de semana unas vacaciones de Navidad que ha sido “buenas” en cuanto a ocupación, aunque podrían haber sido mejores si la situación sanitaria por el coronavirus no hubiera provocado cancelaciones que, en algunos casos, se recuperaron con reservas de última hora.

Anabel Costas, empresaria y vicepresidenta del sector de Hospedaje de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería y Turismo, hace un balance “positivo” de la ocupación en los días de Navidad, Año Nuevo y Reyes. “Y sobre todo -añade- nos tenemos que acordar de las Navidades de 2020, con lo cual éstas han sido muy positivas”.

Explica que diciembre se acabó con un 40 por ciento de ocupación en la provincia, con entre un 65 y un 75 por ciento en las comarcas del Pirineo, y en los hoteles a pie de pistas, entre un 80 y un 90 por ciento.

Destaca que “ha habido como dos bloques, uno hasta el día 31, y otro después de ese día. Creo que se evitaban las aglomeraciones en Nochevieja y se intentaba que no hubiera agobio de gente. También es verdad que la gente llamaba con mucho miedo porque no quería salir de su zona de confort”.

Respecto a enero, dice que la primera semana ha sido muy buena sobre todo hasta el día 4. “A partir de aquí como ya era víspera de Reyes empezó a bajar la ocupación, es lógico, y no ha habido puente, se ha quedado como un fin de semana. En la zona del Pirineo estaremos entorno a un 50 por ciento y en un 80 y 85 por ciento en los hoteles que están a pie de pistas”.

De momento, indica Anabel Costas, “estamos viendo que el mes de enero va a ser mucho mejor que otros eneros porque se están haciendo muchas reservas para los fines de semana, incluso para entre semana, y pensamos que va a ser un enero bueno. Todo esto influye para que el sector sea más positivo, tenga más ganas y nos haga ser más fuertes, y todo lo que hemos vivido nos tiene que ayudar en términos de excelencia, calidad y sostenibilidad”.

En la Jacetania, “el balance de las Navidades es muy positivo”, según el presidente de la Asociación Turística del Valle del Aragón (ATVA), Luis Terrén, para el que “ha habido una primera parte con muy buen tiempo y la gente ha podido disfrutar de las estaciones de esquí (de Astún y Candanchú) y del valle en general”. Luego, hubo “una segunda parte con unos días de peor tiempo, pero también ha habido una buena afluencia de esquiadores”.

Los municipios de Jaca, Canfranc Estación o Villanúa han registrado ocupaciones superiores al 80% en “unas Navidades que han sido muy largas”, como dijo el también alcalde de Villanúa, explicando que “durante muchos días hubo una ocupación media-alta y eso ha sido importante para los alojamientos”. “Es mejor algo así, más equilibrado, que tener solo fines de semana muy masivos”, añadía.

El Valle del Aragón lamenta la cancelación de reservas motivada por la elevada incidencia de la covid-19 al principio de las Navidades. “Sin incidencias, hubiéramos tenido unas Navidades a tope, de comienzo a fin”, dijo Luis Terrén, aclarando que “las reservas de última hora compensaron esas cancelaciones”, dando lugar a “unas buenas Navidades” en una temporada prometedora, en la que “hay mucha nieve desde el puente de la Constitución”.

Según las previsiones del valle, ahora vienen dos semanas con menos actividad, pero “las estaciones trabajarán con grupos”. Las miradas de los centros invernales y los hosteleros se fijan “en todo el mes de febrero, que suele ser otro punto fuerte de la temporada invernal, con carnaval, la Semana Blanca y alguna jornada festiva en Francia”. Tras las últimas nevadas, las estaciones de esquí “llegarán en muy buenas condiciones” a esas fechas.

“No históricas”

Las vacaciones de Navidad han sido “buenas” a nivel turístico en Ribagorza, pero “no históricas”, como podían haber sido. El presidente de la Asociación Turística y Empresarial Valle de Benasque (ATEVB), José María Ciria, calcula entre un 80 y un 85 por ciento la ocupación media en la parte alta de la comarca.

Ha sido una Navidad con muchas anulaciones que se han ido llenando con reservas de última hora, por lo que se ha quedado en una Navidad buena, pero no histórica como podía haber sido”, resume. El periodo más afectado fue el comprendido entre el 20 y el 25 de diciembre, si bien luego las vacaciones remontaron. “Se reactivó a partir del 25 y se ha mantenido bien hasta el 9, con un pequeño parón el día 5 de enero”, detalla Ciria, quien aventura una semana “floja”, la próxima, antes de que el turismo de nieve se vuelva a animar de cara a finales de mes.

El presidente de la ATEVB resalta “el esfuerzo” del sector hostelero para dar un gran servicio estos días, pese a las condiciones y los confinamientos de muchos trabajadores. “Se ha apurado al máximo”, comenta, agradeciendo también que la Nochevieja se permitiera la apertura hasta las 2 de la madrugada. “Se consiguió que no se anularan las cenas de Fin de Año”, dice.

En la parte baja de Ribagorza, por su parte, ha sido una “Navidad tranquila”, apuntan desde la Oficina de Turismo de Graus. “Los datos solo han sido significativos durante el fin de semana de Nochevieja y Año Nuevo, con algo más de movimiento”. En las dos últimas semanas, precisan, se ha atendido a 212 personas. En muchos casos, familias y muchas de ellas de Cataluña.

Turismo desestacionalizado

Sobrarbe despide una Navidad con una ocupación “bastante buena”, en la que se ha constatado que el turismo se van desestacionalizando en una comarca que no tiene estaciones de esquí, aunque sí que acoge a esquiadores que pernoctan allí y por el día van a la estación francesa de Piau Engaly. Así lo señala Paz Agraz, presidenta de la Asociación Empresarial Turística de Sobrarbe, que califica la ocupación de “bastante buena a pesar de las cancelaciones que hubo en las vísperas por el covid”, que han supuesto menos ocupación hotelera de la prevista. Los días más animados fueron entre el 26 de diciembre y el Año Nuevo, momento a partir del cual la afluencia “ha ido bajando paulatinamente” y este fin de semana está siendo “baja” porque la gente ya vuelto a sus lugares de residencia.

Paz Agraz incide en que se va afianzando el turista que llega en esta época del año, en la que, por otra parte, hay un buen número de establecimientos hoteleros que están cerrados porque tradicionalmente no son fechas de muchos visitantes.

No obstante, Sobrarbe cuenta con el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, un lugar que atrae a muchos visitantes no sólo en verano, sino también en otras épocas del año.