Comarcas

COOPERATIVAS

Treinta y cinco años de “defensa de pymes y autónomos”

José Víctor Nogués valora el trabajo de cooperativas agroalimentarias

La cooperativa Virgen de la Corona, en Almudévar, es una de las 32 integradas en la federación.
La cooperativa Virgen de la Corona, en Almudévar, es una de las 32 integradas en la federación.
S. E.

Cooperativas Agroalimentarias de Aragón celebra este año su 35 aniversario “defendiendo los intereses” de más de 51.000 personas en la región. Intereses que, según explica el presidente de las Cooperativas Agroalimentarias de Aragón, el sariñenense José Víctor Nogués, pasan por “la defensa de pymes y autónomos que integran esta federación de las grandes multinacionales”, además de “sacar nuestros productos al mercado internacional”.

“De hecho, las cooperativas más antiguas nacen de la unión de los pequeños y medianos empresarios y agricultores y ganaderos porque era la única forma de comerciar con sus productos”, recuerda Nogués, quien insiste en la importancia de las funciones de Cooperativas Agroalimentarias de Aragón, asociación que agrupa a un total de 160 cooperativas en todo Aragón, 32 de ellas en la provincia de Huesca, en temas administrativos, legislativos y comerciales. Esta red que reune a más de un centenar de cooperativas aragonesas, a su vez, está confederada con otras cooperativas a nivel nacional, en Cooperativas Agroalimentarias, y a nivel europeo, en Copa-Cogeca, órgano con representación en Bruselas.

A lo largo de estas más de tres décadas, “se han conseguido muchos retos”. Sin embargo, Nogués destaca que la incorporación en Europa ha supuesto que los agricultores y ganaderos aragoneses hayan generado un afán exportador. “¿Cómo iba a llevar, un ganadero aragonés, sus corderos fuera de Aragón si no es por las cooperativas? Siempre digo que, desde una explotación agrícola o ganadera de Aragón, si no fuera por las cooperativas, difícilmente el producto llegaría al mercado”, sostiene el presidente de Cooperativas Agroalimentarias.

Para lograr que los alimentos de los pequeños y medianos productores aragoneses se consuman más allá de las fronteras autonómicas, prosigue Nogués, “la federación ha apostado mucho en tener gente preparada, tanto a nivel de normativas europeas como en decisiones de política nacional y europea”.

Cooperativismo como motor de desarrollo rural

Gracias a estos esfuerzos cooperativistas, ejemplifica José Víctor Nogués, “tenemos vinos aragoneses en todo el mundo”. “Con ello no digo que las bodegas privadas también lo hagan, pero me refiero a que gracias a las cooperativas, los pequeños agricultores, que somos los que tenemos las empresas en los pueblos y los que reinvierten los beneficios en el territorio, pueden comercializar sus productos”, apunta.

“Los intereses respecto a las grandes empresas son diferentes porque, al final, los socios somos los dueños, y la federación lo tiene claro: tenemos que defender un modelo donde el agricultor y el ganadero sigan siendo dueños de su empresa”, asegura el presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Aragón, quien observa como impera a día de hoy la necesidad de “unión” entre los pequeños productores: “O te unes o no serás capaz de vender en el exterior, y más en los tiempos que nos llegan (...) Ya no te digo lo que le puede pasar este año al que vaya por libre...”.

Nogués defiende que el cooperativismo es un paliativo contra la despoblación. “Lo que tengo claro es que en las zonas donde no hay cooperativas, la mancha de los pueblos y la riqueza se hace más pequeña”, dice, e insiste en que, “en los pueblos que hay vida, es por la agricultura y la ganadería familiar”.

“La necesidad de ser autosuficientes”

El trigésimo quinto aniversario de Cooperativas Agroalimentarias de Aragón -lo que antes se conocía como Federación Aragonesa de Cooperativas Agrarias (Faca)- coincide con un año totalmente convulso y agitado tanto en lo internacional como en lo local: la inflación, la guerra de Ucrania, las heladas... “Un año como este nos ha puesto en el mapa, a los productores, porque el ser autosuficientes va a ser muy complicado; quizás porque igual se tendrían que haber hecho los deberes de otra forma”, indica Nogués.

“En políticas europeas, tenemos que dejarnos de verlo todo ecológico y verde y hablar de producción y de alimentación, y de la necesidad de ser autosuficientes en productos que sepamos controlar y sepamos producir en Europa. De otro modo, estaremos abocados a que nos traigan de comer”, puso de manifiesto el presidente de los cooperativistas, concluyendo que “es un reto de política europea que, demasiadas veces, solo está haciendo caso a las corrientes ecologistas. Pero aquí hay que hablar de economía real, y la economía real es que comemos todos los días”.