La DPH comparte en Bolivia su experiencia contra la despoblación

La Diputación Provincial de Huesca (DPH) participó durante esta semana en el XI Encuentro de Ciudades Intermedias, celebrado en Santa Cruz de la Sierra, en Bolivia, donde expuso sus actuaciones para afrontar el reto demográfico. Vivienda, conectividad, apoyo económico o asesoramiento técnico a ayuntamientos fueron algunas de las experiencias que el ente supracomarcal compartió en este foro, en el que participó junto a representantes del país anfitrión, Colombia, Paraguay, Honduras y México.

Por parte de la institución altoaragonesa acudió el diputado delegado de Asuntos Sociales, Transparencia, Protección de Datos y Administración Electrónica, Antonio Biescas, quien señaló que “la provincia de Huesca es un claro ejemplo de cómo las instituciones pueden impulsar las oportunidades en el mundo rural”.

“Estas jornadas han puesto de manifiesto que la despoblación es un problema global con muchas aristas y cada zona tiene sus especificidades, pero la Diputación Provincial de Huesca es un claro ejemplo de que las instituciones más cercanas al territorio pueden impulsar oportunidades en el mundo rural”, indicó Biescas. Es el motivo por el que el Centro para la Participación y el Desarrollo Humano Sostenible (Cepad- Bolivia) y la Asociación para la Cooperación al Desarrollo en el Ámbito Local (Acodam- España) han invitado a la institución provincial altoaragonesa a participar en este foro.

El director del Cepad, Carlos Hugo Molina, valoró la experiencia de apoyo al medio rural que se desarrolla en el Alto Aragón, y consideró que Bolivia y otros países latinoamericanos deben actuar para corregir una tendencia demográfica cuyo “diagnóstico no es nada halagüeño”: “Hoy las zonas urbanas albergan aproximadamente al 75% de la población, proyectamos que entonces, en 2032, el 90% de los habitantes residirán en grandes urbes, lo cual supondrá un millón de kilómetros cuadrados de superficie técnicamente sin población”.

Tomás Sánchez y Abel González, diputados por Cáceres y Badajoz respectivamente, cerraron la delegación española en Bolivia.