Comarcas

SECTOR PRIMARIO

La producción de maíz baja un 15 % por la falta de agua

Los altos precios por la crisis energética también afectan al sector

Cosecha de maíz para consumo humano, en los alrededores de Monzón.
Cosecha de maíz para consumo humano, en los alrededores de Monzón.
S.E.

La producción de maíz para consumo humano ha experimentado un descenso del 15 por ciento por la sequía y las altas temperaturas a tenor de los resultados provisionales que la empresa Quality Corn Grain S.A. realiza en Ariéstolas, entre Barbastro y Monzón.

Así lo indica su responsable agronómica, Elena Oyaga, quien detalla que las condiciones meteorológicas han sido determinantes para que el cultivo experimente un descenso cuando la empresa registra una producción anual media de 170.000 toneladas.

La tendencia “ha sido irregular” para los agricultores de maíz en función del tipo de suelos. “Hemos tenido unos 40 días en los que se han pasado los 40 grados. Ha habido campos que se han visto mucho más afectados que otros”, comenta la responsable agronómica de Quality Corn Grain. En su opinión, la menor productividad no ha afectado a la calidad de este año que califica de “correcta”.

A todo ello, apunta, hay que sumar “el incremento de los costes energéticos, insumos y fertilizantes”, además de aumento del coste del agua debido “a que no es lo mismo regar por gravedad a realizarlo por bombeo”, de modo que el gasto habrá sido de 1.000 euros por hectárea. También hay que añadir el coste de gasoil, “por lo que a los 1.800 por hectárea de media al año en una explotación de maíz para consumo humano se elevan a los 3.000 euros”.

Para Oyaga, “el mayor problema que tenemos de cara a la futura campaña es la falta de agua y eso implica que los agricultores se planteen desarrollar cultivos de invierno como cebadas y trigos que precisan de menos agua e impiden la siembra de maíz”.

Ensayos demostrativos del maíz

Por su parte, miembros de la Asociación de Maíz de Consumo Humano y Semilla Alfalfa Aragón han realizado ensayos del cultivo de maíz, en el que han participado la empresa Agroholistics para análisis de tierra, Oscafos con el abonado NPK 7-6-7 con un 25 % de materia orgánica a razón de 2.000 kilos por hectárea, además de estiércol de ganado de vacuno y Quality Corn Grain S.A., con análisis del maíz en la recolección.

Las siembras se realizaron en el mes de abril y la cosecha se adelantó en septiembre por las altas temperaturas.

Para Jerónimo Pueyo, agricultor de maíz, “con las siembras tempranas, ahorramos agua, energía, fertilizante y se utiliza el agua en los meses en los que hay más disponibilidad”. Y destaca que “el agua que no se emplea para el maíz de consumo humano puede aprovecharse en los últimos cortes del alfalfa”.

Y Ángel Gibanel, colaborador técnico de estos ensayos, indica que “los maíces de consumo humano no tienen tanta necesidad de agua y alcanzan la misma producción o superior a los maíces con insecticidas”.

También subraya “la menor producción de maíz” y unos costes que “se han triplicado”. Y reivindica este cultivo “cuyo manejo con siembras tempranas permite un aprovechamiento importante de los recursos hídricos y energéticos”.