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La gestión de los refugios divide a las Federaciones de Montaña

El día 1 ha entrado en vigor la escisión territorial por el pacto de Correspondencia Mutua

Refugio de Respomuso, ubicado a 2.220 metros de altitud en el circo de Piedrafita del Valle de Tena.
Refugio de Respomuso, ubicado a 2.220 metros de altitud en el circo de Piedrafita del Valle de Tena.
FAM

Después de 44 años, se abre un nuevo escenario en la gestión de los refugios de montaña. Este domingo, 1 de enero, ha entrado en vigor la “Correspondencia Mutua de Refugios”, pacto promovido por las Federaciones de Montaña aragonesa, catalana, navarra y asturiana, y al que ya se han sumado siete federaciones territoriales más, no así la andaluza tras anunciarlo recientemente.

Esta escisión con la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada (Fedme), bajo un arisco cruce de comunicados, se trata de una “reivindicación histórica”, ha indicado Javier Franco, presidente de la Federación Aragonesa de Montañismo (FAM), con respecto a los descuentos de las licencias, punto donde nace el desencuentro.

La FAM sostiene que los montañeros que tienen la licencia de la Fedme cuentan descuentos, siendo las federaciones autonómicas quienes llevan a cabo el mantenimiento de los refugios y teniendo que aplicar además sus propias rebajas.

Con todo, en un año normal, los refugios de la FAM publicaron que dejan de ingresar 250.000 euros por los descuentos, frente a los 8.000 euros que la Federación Española otorga a los territorios anualmente.

Sin embargo, la Fedme se ampara en el acuerdo europeo “Tratado sobre derecho de reciprocidad de refugios de montaña”, firmado por Austria, Alemania, Suiza, Francia, Italia y España en el año 1978.

En él se asegura los mismos derechos y condiciones económicas y de uso a todos los federados. “No está fundamentado en que los refugios hagan negocio. Es un movimiento solidario de todos los montañeros con el objetivo de crear una red de desplazamiento común”, ha remarcado José María Nasarre, vicepresidente de la Fedme.

Debido a esta desaveniencia, la Federación Catalana salió de la Fedme en el año 2012. Hace unos meses, las cuatro Federaciones autonómicas anunciaron este nuevo pacto, que motivó un comunicado de la Fedme titulado: “Un primer paso para dividir y romper la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada”.

En el aluden a que el acuerdo tiene “connotaciones políticas” y que “extiende la insolidaridad dentro de la comunidad montañera a niveles intolerables”. Posteriormente, fue retirado de su página web.

La respuesta de la Aragonesa llegó en otro comunicado que compartieron las tres federaciones restantes, y en ella dice que la medida tomada responde a razones financieras. “El problema de los refugios no es ni filosófico ni político ni territorial ni solidario... ¡Es un problema económico!”, exclamaron.

La mano tendida

A pesar de todo, activado el pacto de Correspondencia Mutua de Refugios, las federaciones siguen tendiendo la mano a alcanzar un posible acuerdo. “La acción tiene un afán de sostenibilidad económica de los refugios. Los ingresos de las licencias los dedicamos a la actividad deportiva y al apoyo de nuestros clubs, por ellos buscamos una financiación alternativa”, indicó Javier Franco, puntualizando que Aragón realizó el año pasado 16.000 licencias y tiene 16 de los 39 refugios con los que contará el acuerdo de Correspondencia Mutua.

“Pese a todo”, ha indidido el vicepresidente de la Fedme, “la primera medida de la nueva junta directiva el pasado mes de febrero fue aprobar una línea de ayudas a los refugios de montaña por valor de 50.000 euros, la más grande de su historia, de los cuales 36.000 fueron para Aragón”.

Hasta ahora, el tratado europeo englobaba a los refugios de los seis países signatarios con un sistema de compensación. La Correspondencia se limitará a los 39 refugios de los territorios que, mediante un estudio, ha imitado este equilibrio. Desde la Fedme resaltan que será “imposible” que así entren en red europea.  

“Nuestra intención es recuperar el modelo europeo”

Un total de once federaciones autónomicas de montaña forman parte desde el 1 de enero de 2023 del pacto de Correspondencia Mutua de Refugios. Juntas sumaran más de 200.000 licencias, 39 de los 45 refugios que hay en España y reunirán un fondo de compensación de descuentos por el pago de las licencias que rondará los 175.000 euros a repartir entre los territorios.