montaña
Rescatan a cuatro montañeros, uno de ellos grave al precipitarse hasta la base del corredor Rimaya del pico Maladeta
Son dos escaladores enriscados en Anayet, otro con dolor en el tobillo en Goriz y una posible
fractura de cadera en Maladeta

La Guardia Civil de montaña ha rescatado a cuatro personas este fin de semana, uno de ellos herido grave tras precipitarse en el Corredor Rimaya del Pico Maladeta (Benasque). Los otros son dos escaladores que se han quedado enriscados en la vía de Los Balcones en el Pico Anayet (Sallent) y un senderista con fuerte dolor en el tobillo en el refugio de Góriz (Fanlo), en el parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Fueron los gritos de auxilio que escuchó un montañero en la mañana del sábado los que alertaron de que algo grave había sucedido: un hombre de 57 años y vecino del Bajo Llobregat se había precipitado hasta la base del Corredor Rimaya del Pico Maladeta. Al no tener cobertura móvil, se desplazó hasta el refugio de La Renclusa para dar el aviso.
Los especialistas del Greim de Benasque, la unidad aérea de Huesca y el médico del 061 acudieron al lugar del accidente, donde el hombre se encontraba acompañado. Se inmovilizó al accidentado, utilizando camilla y colchón de vacío debido a una posible lesión de cadera, antes de ser evacuado en helicóptero hasta Benasque, donde fue transferido al medicalizado del 112 para evacuarlo hasta el hospital Miguel Servet de Zaragoza.
La llamada de alerta se produjo mientras la Guardia Civil de montaña auxiliaba a dos escaladores que habían quedado enriscados, sobre las 10:55 del sábado, en Los Balcones en el Pico Anayet. Allí se habían quedado los agentes de montaña de la Guardia Civil de Panticosa.
El helicóptero, antes de partir a Benasque, había acercado a dos especialistas a la pared donde estaban bloqueados los jóvenes utilizando un elemento de agarre llamado Lezard y utilizando dos ciclos de grúa. Uno de los agentes escaló hasta donde se encontraba el primer enriscado y, tras asegurarlo, descendieron hasta donde estaba su compañero y el otro guardia. En grupo llegaron hasta el suelo. Comenzaron el retorno a pie hasta que el helicóptero, que ya había finalizado el rescate de Maladeta, pudo regresar y trasladarlos hasta Panticosa. Los montañeros, dos jóvenes de 32 y 25 años, son vecinos de Girona.
El tercer rescate se produjo un día antes, el viernes en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Un senderista sufrió un tropiezo y el fuerte dolor en el tobillo, cuando se encontraba en las inmediaciones del refugio de Góriz, le impedía continuar. El Greim de Boltaña, la unidad aérea y el médico, a pesar de la fuerte lluvia, accedieron hasta el lugar y evacuaron al hombre, de 60 años y de Castellón.