Alto Gállego

ALTO GÁLLEGO - RECURSOS HIDROELÉCTRICOS

La CHE saca a concurso de nuevo la central de El Pueyo

Licita el contrato de mantenimiento que caduca, pero no es una concesión

La CHE saca a concurso de nuevo la central de El Pueyo
La CHE saca a concurso de nuevo la central de El Pueyo
M.P.

HUESCA.- No parece que el Gobierno central haya tomado una decisión sobre qué hacer con las centrales hidroeléctricas que revierten al Estado. Lo que sí está claro, es que el territorio no obtiene compensaciones. La Confederación Hidrográfica del Ebro ha sacado a concurso de nuevo el contrato de mantenimiento de la central hidroeléctrica de El Pueyo, en el término municipal de Panticosa, que fue la primera del Pirineo en revertir al Estado en 2013. Cuando está a punto de caducar el contrato anterior, se saca otro similar, por lo que por el momento no habrá una concesión definitiva.

Desde entonces, han pasado a manos del Gobierno central los saltos de la Auxiliar de Campo, Barrosa, Urdiceto, y el último el de Lafortunada-Cinqueta, que la concesionaria Endesa entregó en noviembre en "parada segura", por lo que no turbina desde entonces, ya que el contrato sigue "en tramitación" para ponerlo en marcha de nuevo. Lo mismo se hizo con la de Barrosa y la Auxiliar de Campo, mientras que la de Urdiceto, por sus especiales características de quedarse cubierta por la nieve en invierno, sigue detenida.

La CHE ha publicado un contrato de operación, mantenimiento y gestión de incidencias de la central Hidroeléctrica de El Pueyo por un importe total de 552.215,41 euros (456.376,37 sin impuestos), para la explotación de la instalación de El Pueyo por un periodo de ejecución de 24 meses, prorrogable por dos más. Son las mismas condiciones del anterior contrato que se licitó en 2016 y que expira el próximo día 15 de marzo.

Entonces, se licitó por un total de 306.074 euros con el objetivo de "desarrollar, a cargo de una empresa especializada en el mantenimiento de centrales hidráulicas, las labores necesarias para que las instalaciones estén en todo momento en las mejores condiciones de funcionamiento", explicaron en una nota de prensa desde el organismo de cuenca. Ahora, la finalidad es la misma. El plazo para la presentación de la oferta expira el próximo día 2 de abril. La apertura administrativa está prevista para el día siguiente, la de la oferta técnica será el día 15 y el 27 se verá la económica.

Esta central, según los datos que dio a conocer el Gobierno central en enero de 2018 en respuesta a una pregunta el entonces diputado socialista por Huesca Gonzalo Palacín, obtiene un rendimiento económico de unos dos millones de euros al año. Sin descontar los gastos ocasionados por la explotación de la central, con IVA incluido, el valor de las ventas fue de 2.075.501 euros en 2015 (40.056 MWh); 1.960.350 euros en 2016 (44.390 MWh); y 1.860.088 en 2017 (34.026 MWh).

En agosto del año pasado, la Confederación Hidrográfica del Ebro ya sacó a licitación el proyecto de adecuación del sistema de control en la central hidroeléctrica de El Pueyo, por un importe de 861.515 euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de cuatro meses, con el objetivo de mejorar la automatización y control porque el sistema se había quedado obsoleto.

El Ayuntamiento de Panticosa llevó la reversión a los tribunales para reclamar derechos por la ocupación del monte de utilidad pública, pero no le dieron la razón. El mismo procedimiento han seguido los ayuntamientos de Tella-Sin, Plan y San Juan de Plan con la reversión de Lafortunada-Cinqueta, para conseguir beneficios. Este salto, junto con el de Lafortunada-Cinca, que sigue en producción y cuya concesión no caduca hasta el 2067, conforman la central más grande del Pirineo, ya que comparten edificio. En este caso, se calcula que la producción anual ronda los 4 millones de euros.

La resolución se emitió el 18 de diciembre de 2017, diez años después de que venciera la concesión en 2007 y tras caducarse el primer expediente. En noviembre de 2019, aunque no se dio a conocer de forma oficial, Endesa entregó las instalaciones al Estado, concretamente a la CHE, encargada de la gestión. Desde entonces, sigue paralizada a la espera de que salga un contrato similar a este.