Alto Gállego

ALTO GÁLLEGO - CRIMEN DE NAIARA

"Iván Pardo era totalmente consciente de sus actos"

Los médicos forenses que entrevistaron al acusado por el asesinato de la menor en julio de 2017 han indicado que "sabía lo que hacía"

"Iván Pardo era totalmente consciente de sus actos"
"Iván Pardo era totalmente consciente de sus actos"
R. G.

HUESCA.- Los hechos por lo que se acusa a Iván Pardo como presunto autor del delito de asesinato de Naiara, la niña de 8 años que murió en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza por las agresiones que sufrió en la vivienda de Sabiñánigo el 7 de julio del 2017 por no saberse la lección, han quedado puesto de manifiesto este martes al confirmarse los médicos forenses en las diferentes entrevistas que le realizaron "que no se encontraron un sistema de patologías intelectivas, cognitivas y volitivas que modificaran sus actos".

Así lo han indicado los forenses, en la vista oral en la que han puesto de manifiesto que el acusado "sabía lo que hacía, era totalmente consciente y responsable de sus actos" y, por tanto de su imputabilidad.

También han comentado que la operación de un tumor cuando el acusado tenía 16 años, no dejó secuelas importantes a nivel mental que le impidieran desarrollar su trabajo de guarda de seguridad. "En 17 años no ha habido ningún tipo de detección o afección derivada de la posoperación quirúrgica", ha relatado uno de los forenses del Instituto de Medicina Legal (IML) de Palencia.

A raíz de las entrevistas realizadas al acusado, han descartado que el tiastro de Naiara sufriera un trastorno de personalidad ni de un arrebato u obcecación de éste sobre la menor, en base a que "no existía un estímulo capaz de producir una alteración psíquica, una anomalía que produzca un estado de ofuscación que reduzca la inteligencia o la voluntad, la inexistencia de patologías previas, no había estímulos por parte de la víctima ni una relación de causalidad de estímulo-respuesta" que le llevara a cometer las torturas sobre la pequeña.

Otro de los médicos forenses también ha revelado en su exposición que el acusado "presentaba un cuadro depresivo-reactivo, reconociendo los hechos, en un estado de inquietud y nerviosismo" en las entrevista realizadas pero también respaldaron la versión anterior de que esta situación "no afectaba a su capacidad cognitiva y volitiva". El mismo médico ha reconocido que Iván Pardo "no esperaba el resultado de la corrección que pretendía imponer" a Naiara por no saberse la lección. Durante esta jornada de ayer se han expuesto ante el jurado popular algunos de los objetos físicos utilizados por el tiastro de Naiara durante las torturas del día 6, en el que hallaron muestras genéticas tanto del acusado como de la víctima como varios cinturones o la raqueta electrificada, e incluso las "orejas de burro" que aparecen en una de las fotografías y que colocaron a Naiara durante un castigo.

Un estado de la vivienda, en el que los agentes han descrito "el desorden absoluto generalizado" durante la inspección ocular en la vivienda en la que hallaron guijarros de río, cuerdas, dos correas de cuero, toallas manchadas de sangre, una raqueta matamosquitos, un trampo con fuerte olor a amoniaco, agujas, orejas de burro y restos de vómitos en un sofá, dos juegos de grilletes atados con una cuerda

También en la inspección ocular en la vivienda de la abuelastra y el tiastro han hallado evidencias genéticas tanto del acusado como de la víctima en diferentes elementos con restos de cabellos y una bolsa congelada con muestras genéticas de Naiara. En el registro de la casa han quedado puesto evidencias de restos de gasas y esparadrapos y un calcetín con el que supuestamente el autor amordazó a la víctima.

Con anterioridad a los hechos del crimen del 6 de julio en Sabiñánigo, se han expuesto mensajes de wasap entre el acusado su hermano Carlos Pardo y Nieves Pena, en la que ha quedado de manifiesto que los dos últimos eran conscientes de los castigos impuestos a Naiara e incluso ha saltado a la luz, que uno de ellos fue ordenado por la abuelastra, días antes de la noche de la hechos en el fatídico 6 de julio. "Carlos tiene pleno conocimiento del maltrato previo que sufría Naiara antes de los hechos por parte de Nieves e Iván", ha manifestado uno de los investigadores en declaraciones a la fiscal, María Ángeles Hernández

Entre los mensajes expuestos por las investigaciones tecnológicas se han constatado los malos tratos que sufrió Naiara antes de la noches los hechos en los que se referían a la menor como la "tigresa" o "ahora se queja de que le duelen las rodillas", tras captar una imagen en la que indican que Naiara estaba castigada de rodillas sobre unas piedras de río y unas orejas de burro" y relatan que al fondo se ve la silueta de una mujer que corresponde con la de la abuela.

Una instantánea que fue borrada el 8 de julio pero que fue recuperada con posterioridad por los unidades policiales de investigación tecnológica. Ese mismo día los Servicios Sociales retiraron a Nieves Pena la custodia de las dos primas de Naiara, que fueron testigos directos de los hechos como han relevado también los mensajes de wasaps.

NAIARA ESTUVO INCONSCIENTE MÁS DE CUATRO HORAS

Por otro lado, las investigaciones de las llamadas han revelado que "Naiara estuvo inconsciente sin recibir asistencia médica durante más de cuatro horas" en lugar de las dos horas que se comentaba que había estado inconsciente hasta que Iván Pena permite que se avise a los servicios de emergencia. Durante el periodo en el que Naiara estuvo inconsciente, en el teléfono de una de las primas comprobaron que realizaron búsquedas por internet sobre maniobras de "cómo reanimar dar de beber a un persona inconsciente".

MODIFICACIONES DE FISCALÍA Y DEFENSA

Una vez concluidas las pruebas periciales, el Ministerio Fiscal ha añadido la petición de libertad vigilada durante 10 años para el acusado Iván Pardo, que se suma a la petición de prisión permanente revisable por el delito de asesinato de Naiara. Un escrito al que se suman los dos abogados de las acusaciones particulares. En las modificaciones de las conclusiones de los hechos antes de la exposición de las conclusiones mañana miércoles, José Luis Vivas, letrado que defiende Carlos Pardo y Nieves Pena, ha solicitado la nulidad de las pruebas practicadas en la entrada y registro de la vivienda por la ausencia de un abogado por lo que ha afirmado que todas las pruebas recogidas en el interior del inmueble podrían estar viciadas. Una petición a la que se adherido María Gabasa, abogada de la defensa de Iván Pardo.