Alto Gállego

ALTO GÁLLEGO - COLECCIONISMO

Las postales antiguas de Juan Antonio Novás

En su larga colección hay retratos de mujeres, trajes típicos y paisajes de todos los lugares de España

Las postales antiguas de Juan Antonio Novás
Las postales antiguas de Juan Antonio Novás

Juan Antonio Novás lleva coleccionando postales antiguas desde siempre. En su larga colección las hay de retratos de mujeres del País Vasco, de los trajes típicos de Andalucía, de paisajes de diferentes puntos de España y de otros más cercanos a este territorio de la Comarca del Alto Gállego, y hay unas que guarda de manera especial y con más cariño, son las postales del balneario de Panticosa.

"En su mayoría corresponden a los años treinta o cuarenta del pasado siglo, cuando la postal no era fotografía, por aquel entonces se pintaban o dibujaban a mano y luego se imprimían. La postal normal como fotografía empezó en blanco y negro en los años cincuenta y desde los veinte hasta entonces, como digo, la gente las pintaba o dibujaba y luego las imprimía y así se vendían", comenta.

Argumenta Novás que esa técnica era la misma que se utilizó en los años quince y veinte del siglo pasado para retratar, el balneario de Panticosa. Una de esas fotografías recuerda el Hotel de la Pradera que desapareció arrastrado por un alud. En otras instantáneas se dibuja la ajetreada vida que había en el balneario, de unos que viajaban hasta allí para "tomar las aguas", de otros que pasaban unos días en pleno Pirineo, y en otras fotografías que guarda Juan Novas aparece el Hotel Casa de la Pradera visto desde diferentes enclaves del balneario.

También tiene varias vistas generales y alguna de la sinuosa carretera, que discurre junto al río Caldarés, para acceder hasta allí desde el pueblo de Panticosa. Y es que la historia del balneario de Panticosa se escribe de diferentes maneras. Sus aguas termales son muy apreciadas desde hace mas de dos mil años. Hoy junto a los nuevos edificios, todavía quedan viejos vestigios que recuerdan la estación termal de antaño de reconocida fama entre finales del siglo XIX y  principios del siglo XX. En la primera mitad del siglo XX, este balneario fue el centro termal por excelencia para amplios sectores de la burguesía española.

En las fotografías de Juan Novás, en las vistas generales del enclave, se aprecian los picos de más de tres mil metros (Brazato, Infiernos, Argualas...) que rodean el circo natural donde se encuentra la estación termal, a 1.636 metros de altitud, por lo que este enclave es también punto de partida de numerosas ascensiones.

Por este balneario han pasado personajes de la talla de Alfonso XIII,  Rosales, Ortega y Gasset, y Cánovas del Castillo, entre otros. Se guarda un especial recuerdo de la estancia de Santiago Ramón y Cajal, quien pasó aquí un tiempo de curas mientras practicaba su gran afición, la fotografía. Y otros, como Niceto Alcalá Zamora, Perico Chicote, Zarra, Iriondo, Panizo... también lo visitaron y hablaron de él.

La historia escrita del balneario empieza en los primeros años del siglo XVII. En el año 1899, se crea la sociedad Aguas de Panticosa, con quien se vive el auge del termalismo en España, y Panticosa constituye un referente nacional. Fue declarado de interés Turístico nacional en 1966.

Juan Antonio Novás nació en Broto pero desde pequeño ha vivido en contacto con el turismo. "Un tío que me adoptó de pequeño, llevaba un hotel en Sallent de Gállego y otro en Broto. Luego cuando me casé teníamos una tienda en balneario de Panticosa donde vendíamos manzanilla silvestre, recuerdos, y por supuesto, postales, allí estuve cuarenta años, y en Sabiñánigo tuvimos Casa Berdón".

Dice que no sabe exactamente cuántas postales tiene, "sé que son muchas pero la cantidad no la sé, no las he contado".

Las postales antiguas siempre han acompañado a Juan Antonio Novás. De muchas de ellas recuerda fechas y anécdotas simpáticas que bien darían para más de un libro.