Alto Gállego

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Broto: "Los mayores deben ser los protagonistas en el cambio del modelo de atención"

La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales ha desgranado los objetivos del “Plan del Mayor. Generación de cambio”

La consejera María Victoria Broto y la directora del IASS, Noelia Carbó, en la presentación del Plan del Mayor.
La consejera María Victoria Broto y la directora del IASS, Noelia Carbó, en la presentación del Plan del Mayor.
DGA

“Adecuar los servicios sociales a las necesidades de una generación que demanda una nueva atención”. Este es, según la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, el principal objetivo del “Plan del Mayor. Generación de Cambio”, un eje estratégico del Gobierno de Aragón sobre el que pivotará hasta el final de la legislatura toda la atención que se presta a los mayores.

La consejera insiste en que los mayores de hoy “son una generación de cambio, ya que en su día fueron artífices de los grandes logros sociales que ahora disfrutamos, y pensamos que deben ser los protagonistas en el cambio del modelo de atención en el que estamos trabajando”.

Este plan recoge 49 actuaciones (20 ya asentadas y 29 nuevas), implica una financiación extra de 66,7 millones de euros de aquí a 2023 (se suma a los 189,9 que anualmente destina Ciudadanía a la atención a los mayores) y quiere llegar a más de 204.000 aragoneses.

Entre las nuevas medidas que recoge y que se financiarán con los Fondos Europeos del Plan de Recuperación y Resiliencia, se encuentra la construcción de dos nuevos complejos residenciales multiservicio, en Ateca y en el barrio de Valdefierro de Zaragoza, y obras en nueve de las residencias del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), entre ellas, Ciudad de Huesca y Sagrada Familia en Huesca capital. “Vamos a crear 20 unidades de convivencia en estos centros que recrearán ambientes hogareños, personalizados y adaptados a las necesidades de los mayores que vivan en ellos”, explica María Victoria Broto.

Además, el IASS va a invertir en torno a 100.000 euros en el Hogar de Mayores de Sabiñánigo para la eliminación de barreras arquitectónicas. En concreto, se va a instalar un ascensor (una medida muy demandada por los usuarios), se creará una nueva sala y baños adaptados.

El modelo de atención centrada en la persona es el que regirá en estas obras y en las que llevarán a cabo las entidades locales, sociales y mercantiles con plazas concertadas que van a recibir en total 13 millones de euros en subvenciones, con dinero procedente también del Plan de Recuperación y Resiliencia. En total, se van a beneficiar de estas ayudas 90 entidades locales, sociales y mercantiles.

El Ayuntamiento de Sabiñánigo es uno de los beneficiarios de estas subvenciones, en concreto, 44.295,98 euros que, sumados a una aportación municipal, servirán para actualizar el sistema de comunicación y centralita de la residencia municipal Alto Gállego de esta localidad. Este centro está trabajando en un proyecto de eliminación de sujeciones y, por ello, va a actualizar los sistemas de comunicación de las habitaciones con la centralita, de forma que los mayores puedan avisar rápidamente cuando tengan un problema.

Pero este Plan del Mayor no solo incluye inversiones en infraestructuras, sino una amplia variedad de medidas destinadas a mejorar la calidad de vida de este sector de la población, a fomentar su integración, participación, el envejecimiento activo y a descentralizar los servicios para promover el arraigo de las personas en el medio rural. “Queremos que las personas puedan permanecer en sus casas el mayor tiempo posible y desarrollar su proyecto de vida con autonomía, pero con servicios adaptados a cada etapa de su vida”.

De esta forma, las nuevas medidas contemplan la asistencia técnica a las comarcas para apoyar a las entidades locales en la atención y protección de los mayores, fomentando la prevención y su permanencia en el entorno familiar. También se implementarán servicios tecnológicos integrados que permitan identificar y alertar de forma precoz sobre situaciones de riesgo, una medida que llegará a cerca de 1.500 personas.

Siguiendo en el apartado tecnológico, se modernizarán los sistemas de comunicación y tecnologías de la información en las residencias, que permitirán mejorar las redes de conexión y los equipamientos.

El IASS trabaja también en la implantación de nuevos programas de envejecimiento activo para mejorar la calidad de vida de las personas que viven en residencias y que se encuentran en situación de dependencia.

Asimismo, se va a elaborar una guía de recursos organizada en función de la etapa vital, para mejorar la información sobre los servicios existentes y facilitar el acceso a los mismos, tanto de usuarios como de familiares. “El objetivo final es transformar el concepto de atención a las personas mayores en la Comunidad, para darles un papel protagonista, fomentar su autonomía y su permanencia en el entorno el mayor tiempo posible”, concluye la consejera.