Cáritas Sabiñánigo atendió en 2021 a 177 familias, 42 menos que el año anterior

Cáritas Sabiñánigo ha publicado su informe anual de 2021. Este documento refleja que los trabajadores y los 37 voluntarios de Cáritas Sabiñánigo atendieron ese año a 177 familias, cifra superior a la de 2019 (133 familias) e inferior a la de 2020 (219 familias). En total, 492 personas recibieron ayudas el año pasado.

En el mismo periodo de tiempo entregaron 23.636 kilos de alimentos, cantidad casi el doble que la del 2019 (12.308 kilos) y solo ligeramente inferior a la de 2020 (26.454 kilos).

También 195 personas pertenecientes a 52 familias recibieron ropa, artículos de cama y mesa, calzado y complementos.

Respecto al origen de las personas que se han beneficiado de estas ayudas, un 50 por ciento son españolas, un 25 por ciento marroquíes, y el 25 por ciento restante son hispanoamericanas, principalmente de países como Venezuela, Colombia, República Dominicana y Nicaragua.

Los voluntarios de Cáritas Sabiñánigo trabajan en los siguientes proyectos: despensa solidaria, ropero, transporte, carga y descarga, formación y acompañamiento a personas mayores en soledad no deseada. También coordinan y colaboran en las Campañas de Recogida de Alimentos organizadas anualmente por el Banco de Alimentos de Huesca.

Asimismo, Cáritas Sabiñánigo proporciona ayuda logística y financiera al Centro de Solidaridad Interdiocesano de Huesca (Proyecto Hombre), que presta una labor de tratamiento y educación para la prevención de las adicciones al juego y las drogas en el municipio de Sabiñánigo y comarca.

En 2021, además, realizaron otras actividades como transporte de alimentos a localidades del Valle de Tena, con ayuda de Cruz Roja y la Comarca del Alto Gállego, préstamo de ordenadores portátiles a centros educativos, entrega de camas, colchones, somieres y otros artículos donados por empresas de hostelería del Valle de Tena, con ayuda de los Servicios Sociales de la Comarca y Ayuntamiento de Sabiñánigo. También organizaron un curso de habilidades sociales para mujeres en riesgo de exclusión social.

En cuanto a este año 2022, desde Cáritas Sabiñánigo explican que ha comenzado con muchas familias en situación de necesidad, “algunas menos que en 2020 pero aún muchas más que en 2019. Nuestro objetivo para este año es sensibilizar aún más, si cabe, a la sociedad, a los centros educativos, a las asociaciones, sobre la razón de existir de Cáritas y su necesidad para combatir la pobreza. Además, en la medida que la pandemia lo permita, acompañaremos a más personas mayores que puedan agradecer la compañía de un voluntario, y realizaremos nuevos cursos de formación para mujeres en riesgo de exclusión social”.

Cáritas Sabiñánigo agradece a los voluntarios y trabajadores el tiempo y el trabajo dedicado a los necesitados, así como a los socios, a los donantes, a la Comarca del Alto Gállego, al Ayuntamiento de Sabiñánigo, a la Cruz Roja, “y a tantas empresas y particulares de Sabiñánigo y del Valle de Tena que han ofrecido su ayuda o sus donativos. Y gracias a los medios de comunicación, estamos rodeados de una sociedad que sabe ayudar a los necesitados, y eso nos da mucha motivación para seguir trabajando”.