Alto Gállego

ALTO GÁLLEGO - COSAS DE CASA

Un recorrido etnográfico por las calles de Biescas

A través de 22 fotografías antiguas de esta villa se ha creado un itinerario que anima a mirar atrás

Comparación entre la calle Esperanza en los años 20-30 del siglo pasado y la actual.
Comparación entre la calle Esperanza en los años 20-30 del siglo pasado y la actual.
M.P.

Recorrer las calles de Biescas e imaginar en el momento cómo eran antaño ya es posible. Se trata de un recorrido etnográfico que ha convertido las calles de esta localidad del Alto Gállego en un museo al aire libre. A través de 22 fotografías antiguas de esta villa, que abarcan desde 1905 hasta los años 40 del siglo pasado, colocadas en los mismos enclaves donde fueron captadas, se ha creado un itinerario que anima al vecino, al visitante, a echar una mirada atrás y descubrir cómo han evolucionado estos rincones pelaires con el paso de los años.

Las imágenes van acompañadas de un código QR que al escanearlo reproduce una explicación audio-guiada de la propia fotografía, con curiosidades y detalles que se pueden escapar a la percepción de la persona que la esté visualizando.

Evolución del puente sobre el río Gállego.
Evolución del puente sobre el río Gállego.
M.P.

En el paseo, veremos la evolución de sitios tan emblemáticos de Biescas como el puente sobre el río Gállego, los porches de la plaza del Ayuntamiento, las iglesias de San Pedro y San Salvador, la oficina de turismo, el vivero, la plaza Albéitar, las calles María Moliner, Valle de Tena y San Julián, la rampa del polideportivo, el zoque de San Antonio, la fuente de las mercedes….y así, hasta 21 lugares en la propia población, además de otra imagen, la número 22, que se ha colocado en el puerto de Biescas, a 1.500 metros de altitud, ascender hasta allí resulta una atractiva excursión.

Esta iniciativa que se puso en marcha el pasado mes de marzo, tiene detrás dos años de trabajo. “Hemos investigado en archivos fotográficos, recopilado imágenes, para después seleccionar las que pensamos que eran más apropiadas para colocar. La idea de este proyecto es mostrar la evolución que han tenido las calles y plazas de Biescas, ya que ha sido notable, sobre todo después de la Guerra Civil, porque Biescas en la contienda estuvo muy castigada”, explica Antonio Lalaguna, presidente de Erata.

Sergio García, Nuria Pargada, Ramón Campo y Antonio Lalaguna.
Sergio García, Nuria Pargada, Ramón Campo y Antonio Lalaguna.
M.P.

Entre las fotografías antiguas encontradas, argumenta que, en una de ellas, la del lavadero, “pudimos constatar que estaba cubierto y eso dio un giro al proyecto de su recuperación, que estaba en marcha, y esa recuperación se hizo como estaba en la fotografía encontrada”, apunta Lalaguna.

Ramón Campo, miembro de Erata, destaca la fotografía de la iglesia del barrio de la Peña. “Aquí, hemos visto que la torre sale más hacia afuera de lo que estaba antes de la guerra. En todas las imágenes hay aspectos que nos llaman la atención”.

La Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala ha contribuido en la financiación de los carteles que se han creado con las imágenes. “Nos plantearon colaborar y nos pareció un proyecto muy interesante, además está en consonancia con la filosofía de la Reserva”, apunta Sergio García, gerente de esta Reserva.

Además, se ha elaborado un folleto que permite seguir el recorrido de las fotografías, material “que se ha trabajado con mucho cariño y que tiene su encanto, ya que está pensado en un diseño que recuerda antaño”, explica la alcaldesa de Biescas Nuria Pargada.

Este folleto incluye un mapa con los 22 sitios donde se encuentran las fotografías y una pequeña explicación de la iniciativa, en castellano y en francés. “Desde el ayuntamiento queremos invitar a vecinos y visitantes a ver ese antes que teníamos en Biescas y compararlo con el presente”, concluye la alcaldesa.

El resultado de este trabajo salta a la vista porque las fotografías están puestas en los puntos donde fueron tomadas en su momento, por lo que la visión del antes y él ahora es muy clara.

Este proyecto ha sido desarrollado por la Asociación Cultural Erata, con el apoyo del Ayuntamiento de Biescas y la colaboración de la Reserva de la Biosfera Ordesa-Viñamala.