Bajo Cinca

BAJO CINCA - CULTIVO ALMENDRO

La almendra en superintensivo sobresale en Ontiñena

El propietario de una finca destaca las ventajas de la automatización

La almendra en superintensivo sobresale en Ontiñena
La almendra en superintensivo sobresale en Ontiñena
S.E.

HUESCA.- Una de las explotaciones pioneras de almendro en Ontiñena dedicadas a su producción en superintensivo del seto en regadío va incrementando su eficacia hasta llegar a los 900 kilos de pepita por hectárea.

El propietario de una de las dos explotaciones de Ontiñena destina esta explotación de unos 110.000 almendros que cubren una superficie de 50 hectáreas para las variedades de Soleta y Lauranne, ambas de floración tardía, desde el año 2015.

La distribución de los almendros en la explotación se encuentra repartida en tres fases, las dos primeras se plantaron en los meses de mayo y septiembre del año 2015 y las otras dos restantes, repartidas en septiembre 2016 y la última entre mayo y junio del 2017.

En este caso, la explotación se denomina superintensiva porque consiste en la plantación de unos 2.200 árboles por hectárea con calles de 3,5 metros de largo y tan solo una separación 1,25 metros entre árboles.

Dependiendo del año de plantación "los resultados son dispares" detalla el dueño. "Producen diferente las que llevan cuatro o cinco años de las más jóvenes a las que apenas llevan tres años", comentan.

Pese a no cumplirse las expectativas en cuanto a producción, el propietario de esta explotación novedosa se muestra contento por la evolución. "Las proyección iniciales eran producir más almendra de lo que estamos haciendo pero por otro lado veo que el sistema funciona porquese realiza de forma automatizada desde el riego por goteo, fertilizantes, etcétera", subraya.

En este sentido, hace hincapié en que es posible "sacar adelante la finca salvo el primer año de las plantas por la poda". A partir del año y medio desde su plantación, toda la poda se realiza de forma automatizada.

Hasta el momento se han cosechado las 25 hectáreas dedicadas a la variedad Lauranne, con media plantación de cuatro años que desarrolla una producción media de unos 900 kilos por hectárea respecto a los 1.200 previstos y la otra mitad de tres años, con una productividad media de 680 kilos por hectárea, con una estimación previa de unos 600 kilos por hectárea.

Una productividad menor en las plantaciones de cuatro años que atribuye a las afecciones del cierzo a finales de agosto, que tiró una gran cantidad de almendra al suelo, justo en el momento anterior a su recogida.

De la variedad de soleta aún no se disponen al tratarse de una variedad más tardía en cuanto a su recolección, entre mediados y finales de septiembre, mientras que la Lauranne se recogió a principios del mes pasado.

Toda la almendra recolectada se traslada a una comercializadora para quitarle la cáscara.

Al final, el propietario de esta explotación bajocinqueña destaca que "al final cada año vas cogiendo un poco más" de cantidad.

Los precios se sitúan este año entre los 3,1 y 3,2 euros por kilo frente a los 5,4 euros del año pasado. "Ha disminuido la demanda de la almendra por el menor consumo en aerolíneas y hostelería", añade.