Las heladas reducen a la mitad la contratación para recoger fruta

La alcaldesa de Fraga, Carmen Costa, se reunió este viernes con el delegado de Agroseguro en Aragón, Juan Cruzán, para analizar la afección que han provocado en el sector frutícola de la zona, las heladas del fin de semana pasado, que han podido acabar con la mitad de la cosecha de fruta dulce de esta campaña (unos 150 millones de kilos). A la reunión asistió también el director de Mercofraga, Ignacio Gramún. Cruzán aseguró que el impacto de la helada había sido importante y que ya se habían recibido muchos partes y se esperaban más. Costa y Gramún le trasladaron la inquietud que hay en el sector por la importancia de agilizar al máximo todos los trámites y de realizar peritaciones lo más ajustadas al daño real, a lo que el delegado de Agroseguro ofreció toda su colaboración. Los trabajos de peritación se iniciarán enseguida y en abril habrá una nueva reunión en la que se presentarán los datos definitivos sobre valoración de daños y compensaciones para ofrecer toda la información al sector agrícola de la zona.

Las primeras estimaciones que manejan ayuntamientos y organizaciones agrarias es que se ha podido perder la mitad de toda la cosecha de fruta que se esperaba en la principal zona productora de fruta dulce de todo Aragón. En todo caso, esa merma de fruta se traslada al mercado laboral, de manera que se reducirá la contratación de trabajadores temporales a la mitad. La alcaldesa de Fraga, Carmen Costa, advertía ayer de esta problemática. “Ahora mismo hay entre 2.000 y 3.000 personas que podían trabajar en la campaña de este año y que ya no encontrarán empleo. Hay que ser claros y lanzar el mensaje de que no vengan aquí porque no tendrán trabajo ni vivienda y que busquen otras zonas que no se hayan visto afectadas por las heladas”.

Carmen Costa planteó este problema en la reunión entre Gobierno de Aragón e instituciones de las comarcas frutícolas que tuvo lugar esta semana en Zaragoza y fue clara, “el control de los trabajadores con contrato no es problema. El problema es el control de la inmigración, de las personas que llegan sin un contrato previo, pese a todos los confinamientos perimetrales que pueda haber”, señaló la alcaldesa de Fraga.