Bajo Cinca

LA ENTREVISTA

Gloria Cuenca Bescós: “Somos la única especie que lo tiene todo, tanto lo bueno como lo malo”

La catedrática de Paleontología de Unizar y Premio Príncipe de Asturias ofreció una charla en Fraga sobre los fósiles de Atapuerca

Gloria Cuenca Bescós.
Gloria Cuenca Bescós.
A. S.

“¿Qué es lo que nos caracteriza? Todo. Somos vanidosos, ambiciosos, orgullosos, valientes, amables, sociables, jerárquicos, comunicativos. Somos amantes, médicos, asesinos, demonios, poetas, músicos, científicos. De todo. Somos la única especie que lo tiene todo. Lo bueno, buenísimo, y lo malo, malísimo”. Gloria Cuenca Bescós (Lagunillas del Zulia, Venezuela, 1958), catedrática de Paleontología y vicerrectora de Unizar, además de Premio Príncipe de Asturias, ofreció esta semana una charla en el centro educativo Río Cinca de la Uned en Fraga, donde sembró grandes dosis de certeza sobre las dudas e incógnitas antropológicas de los más de 70 asistentes.

A través de la conferencia El paisaje humano hace un millón de años. Los fósiles de Atapuerca nos hablan, Cuenca Bescós desgranó características físicas y culturales del homo antecessor, especie a la que pertenecen los hallazgos de la sierra burgalesa.

“El antecessor es el fósil más antiguo de los encontrados en Europa”, comenzó la paleontóloga, quien celebró que “Atapuerca lo tiene todo: los fósiles más antiguos, pero también 17 cráneos enteros”.

“En las cuevas de Atapuerca hay suelos de ocupación, pero no hay evidencia de que vivieran ahí. Sabemos que no vivían ahí, pero no podemos decir dónde. Tenemos muchos problemas para descifrar este tema”, explicó.

“Los fósiles nos permiten conocer el momento en que nuestro cerebro comenzó a ser grande”, dijo, detallando que esta característica se puede conocer gracias al estudio de los moldes endocraneales, lo que permite saber el volumen: “No hay más que medirlo, longitud por anchura, y hacer pruebas. En los años 50, ya lo hicieron así”.

Ahora, las nuevas tecnologías “permiten hacer escáneres para reconstruir el molde endocraneal de cualquier fósil bien conservado”. Además, “con un cráneo fósil bien conservado, podemos tener un mapa bastante acertado de cómo eran las diferentes áreas del cerebro”.

Respecto a la capacidad auditiva del antecessor, las nuevas tecnologías también han aportado información muy valiosa. “Se han relacionado los huesos del oído externo, medio e interno con la capacidad de oír. Los cráneos analizados de la Sima de los Huesos tienen el mismo comportamiento que los de un homo sapiens. Es decir, ¿hablaban los seres humanos de hace millones de años? No lo sabemos. ¿Oían de manera parecida a un ser humano moderno? Sí”, respondió, rotunda, la ponente.

Algunos de los fósiles hallados, según explicó la vicerrectora de Unizar, mostraban malformaciones físicas, revelando otras conclusiones: “Uno de los cráneos tenía cerca de 70 años, y además tenía una infección, un flemón, por la rotura de uno de los premolares. Seguramente, este flemón le llevó a la muerte. Pero mientras estaba vivo, lo sabemos por la cicatriz del hueso, tuvo que estar dos meses atendido por sus compañeros de grupo. Es decir, algunos de los homínidos ya tenían la capacidad de cuidar”.