Reyerta en Jaca: "Temí por mi vida e integridad física durante la agresión"

HUESCA.- El testimonio de dos vecinos de Jaca que sufrieron agresiones en el exterior del pub Miniclub de Jaca se suma a las que también padeció el vecino de la capital jacetana y origen argelino, Habib Benzhiane, cerca del bar Corral junto a su amigo y policía local, durante la madrugada del 26 de enero de 2014, tras el altercado que se produjo en el cuarto de baño, Mientras este se encontraba dentro junto a otro amigo, los militares "golpearon" o "aporrearon" las puerta, según diferentes versiones y posteriormente dio lugar a un enfrentamiento con zarandeos y empujones que se trasladó en una reyerta media hora después en la calle.

Este ha sido uno de los momentos más destacados del segundo día de juicio de la reyerta de Jaca que se ha celebrado este martes, en la Audiencia Provincial de Huesca

Tras el altercado del baño, el policía ha indicado que se encontraba en la barra junto a su novia y vio cómo su amigo argelino se acercaba a la barra hacia atrás mientras era empujado desde el baño. Acto seguido, ha explicado el policía local, el dueño del pub y él mismo se interpusieron entre Benzhiani y los militares, para evitar que la riña pasara a mayores.

En el momento en el que fue desalojado el local y todos los clientes salieron en masa dos vecinos y a su vez primos de una familia de Jaca, se vieron envueltos en la primera reyerta fuera del local en la que fueron agredidos por militares de la Guardia Real.

"Salimos todos en tromba, nos cogieron y un grupo de al menos ocho personas nos empezó a pegar patadas, puñetazos, etcétera", según ha relatado uno de ellos quien se mostró sorprendido al recibir "los golpes sin motivo aparente", ha comentado.

Al final, uno de ellos logró escapar y avisar de este incidente a la policía local. "Me quedé en el interior del vehículo y luego me fui con mi primo al ambulatorio. Al día siguiente, presentamos denuncia a la Policía Local". El otro permaneció en el lugar de la agresión -junto al pub miniclub- y ha afirmado que tuvo suerte de que llegara la Policía "a la que no vio llegar porque se encontraba aturdido". Al día siguiente se enteró de que en la misma noche habían pegado a otros dos vecinos de Jaca, en relación a Benzhiani y su amigo.

Por su parte, el policía local y amigo del agredido ha descrito la paliza que recibieron cerca del bar Corral después de escuchar "¡Esos son!" por parte de los militares. En ese momento, describió ayer en la vista oral, "nos empezaron a machacar y golpear con una saña fuera de lo normal".

En un momento dado, ha relatado, " me zafé y logre escapar" y evitó una caída al ponerle una zancadilla uno de los militares y lo gró evitar caerse al suelo. "Temí por mi vida e integridad física", ha explicado el policía respecto a este momento de los hechos.

También ha recordado los insultos "racistas y en tono despectivo xenófoco" que los militares de la Guardia Real dirigieron a su amigo durante esta reyerta, y se ha referido a las secuelas que sufrió tras este altercado, que "fueron más psicológicas que físicas" que le obligaron a pedir la baja laboral a su médico.

Negó haber entrado en el bar Corral de Jaca. Un hecho que se contrapone a la versión de otro policía en la vista oral de este martes durante la toma de pruebas la misma noche de los hechos, al conocer por parte de un empleado del establecimiento que el policía amigo de Habib llegó a entrar dentro.

EL JUICIO LLEGA A SU ECUADOR

El juicio por la reyerta de Jaca alcanza mañana miércoles su ecuador con la declaración del amigo que acompañó al vecino de Jaca en el interior del baño, antes de que este saliera y se produjera el enfrentamiento que ha dado lugar a interpretaciones enfrentados entre agresores y agredidos.

Además habrá distintos testimonios propuestos por las distintas partes del juicio, entre ellos una prueba médica que arrojará más luz sobre el resultado de las heridas de los agredidos durante el altercado.