Jacetania

JACETANIA - GANADERÍA EXTENSIVA

Utilizan drones en la Garcipollera para seguir al ganado extensivo

Han demostrado su eficacia en las pruebas realizadas este verano

Utilizan drones en la Garcipollera para seguir al ganado extensivo
Utilizan drones en la Garcipollera para seguir al ganado extensivo
G.A.

HUESCA.- La Finca Experimental de La Garcipollera, perteneciente al Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (Cita), ha desarrollado una acción demostrativa durante este verano para evidenciar la utilidad de los drones en la gestión de rebaños de ovino en distintos tipos de pasto.

El Cita ha aportado sus rebaños, instalaciones y conocimientos sobre el manejo de los animales en sistemas ganaderos extensivos, de la mano de sus investigadores de la Unidad de Producción y Sanidad Animal, Javier Ferrer e Isabel Casasús, y del personal técnico de la Finca Experimental La Garcipollera, informa el ejecutivo autónomo en un comunicado de prensa.

El grupo Delsat, dirigido por Daniel Yuste, ha aportado su experiencia como empresa operadora de drones y su especialización en filmación aérea audiovisual para trabajos técnicos y científicos, como el proyecto Pharmadron para el transporte farmacéutico en áreas rurales.

El testaje se ha realizado en las condiciones tradicionales de manejo de la montaña pirenaica, donde los rebaños suelen aprovechar pastos de fondo de valle en primavera y otoño y pastan durante el verano en puertos de montaña, con un manejo muy diferente en ambas zonas.

Los pastos de fondo de valle suelen presentar una orografía suave, estar muy parcelados y más o menos cercanos a las explotaciones, por lo que el pastoreo se realiza mediante cercados o guiados por el pastor.

Por el contrario, los pastos de montaña presentan una gran extensión y una orografía mucho más abrupta. En ellos, los rebaños suelen pastar libremente, con visitas periódicas y frecuentes de los ganaderos para su vigilancia y cuidado.

GANADERÍA DE PRECISIÓN Y EL USO DE DRONES

La ganadería de precisión ha experimentado un desarrollo espectacular en los últimos años, al combinar el uso de sensores, sistemas de transmisión y procesado de la información que permiten un control individualizado de los animales, su estado y sus rendimientos.

En la actualidad se comercializa una gran diversidad de equipos, desde soluciones tan sencillas como las cámaras para la vigilancia de los animales en las instalaciones a los más complejos robots de ordeño, con distribución de alimentos y sensores para recoger múltiples datos de los animales.

En este ámbito el uso de drones en agricultura ha progresado con aplicaciones que optimizan la gestión de los recursos y los cultivos.

En ganadería se utilizan sensores más o menos complejos para estimar la cantidad y calidad del pasto, posicionar a los animales o analizar su salud y bienestar. En su versión más sencilla, un dron equipado con una cámara permite la localización e inspección de animales e infraestructuras y puede facilitar los movimientos del rebaño.

El desarrollo de tecnologías de fácil uso y bajo coste cobra especial importancia para la ganadería extensiva, ya que pueden contribuir a mejorar la calidad de vida del ganadero, facilitándole un trabajo que en zonas de difícil orografía puede presentar especial penosidad.

Esto es vital para garantizar la supervivencia de una ganadería ubicada en ecosistemas cuyo alto valor natural está ligado al aprovechamiento de pastos.

EL EQUIPO

Para este trabajo se utilizó un multirrotor DJI Phantom 4ProV2, un modelo rápido y versátil que permite la aproximación a zonas complejas desde un punto de vista orográfico. Para utilizar estos equipos los operadores deben certificarse como pilotos de drones en centros acreditados por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea, como Delsat International Group, con formación teórico-práctica sobre el funcionamiento de las aeronaves y las técnicas de vuelo.

MOVIMIENTOS DEL REBAÑO EN FONDO DE VALLE

Los equipos se testaron inicialmente en praderas de fondo de valle en primavera. En ellos, el rebaño respondió de inmediato ante el estímulo, pilotado a distancia por un operador conocedor de las estrategias necesarias para dirigir a los animales.

Pasado un cierto tiempo de vuelo se detectó una habituación del rebaño a la presencia del dron, por lo que se valoró añadir un dispositivo de amplificación de sonido emulando el ladrido de un perro para ejercer mayor intensidad de respuesta, que actualmente se encuentra en proceso de desarrollo.

Durante el verano el testaje se realizó en pastos herbáceos de montaña, sobre una superficie aproximada de 700 hectáreas, con una altitud entre 1.600 y 2.400 metros, aprovechada por un rebaño de 250 ovejas.

El control se realizó desde un único punto, el más elevado, con buena visibilidad (y línea de comunicación con el aparato) sobre prácticamente todo el territorio, y con una distancia máxima de tres kilómetros a los puntos a controlar.

El dron superó durante su vuelo más de 2.000 metros de desnivel de subida y las bajadas y acercarse a las infraestructuras para valorar su estado desde la pantalla con suficiente precisión: agua corriente en los bebederos, bloques de sal remanentes en los saladeros, continuidad del hilo eléctrico, etcétera.

Los drones han demostrado ser una herramienta muy útil para mover y dirigir al ganado, revisar el estado general de los animales y los pastos además de reducir el esfuerzo y aumentar la eficiencia en el trabajo.