JACETANIA - DE CERCA
José Luis Dessy: "El Gordo de Navidad significa mucho para la administración"
"Con dar un gordo de navidad ya me conformaría. La avaricia rompe el saco", asegura el jacetano
JACA.- Da la impresión de que tiene un gran potencial para repartir alegría entre las familias de Jaca desde su administración de loterías. En estas fechas prenavideñas, ¿se siente a veces como si fuera Papá Noel o uno de los Reyes Magos?
-En alguna ocasión, sí.
¿Cuántos Gordos de Navidad harían falta este año para compensar la pandemia del Covid-19?
-Con uno ya me conformaría. La avaricia rompe el saco.
Si los Reyes de Aragón levantaran la cabeza y vieran el panorama mundial, ¿retornarían a su reposo eterno a la velocidad del rayo?
-Seguro que sí.
¿Cuál es la excitación que más le irrita?
-Las llamadas de los call-center.
Por el contrario, ¿qué es lo que le gusta exprimir hasta la saciedad?
-Los viajes, en las pocas ocasiones que dispongo.
Sostiene el psicólogo, investigador y profesor de la Universidad de Harvard Howard Gardner que no hay un buen profesional que sea mala persona. ¿Conoce a alguno para contradecirle?
-Sí.
¿El negocio es la negación del ocio o usted se divierte currando?
-A veces sí, pero cada vez menos.
De todos los premios que ha repartido desde su conocido y céntrico establecimiento de la calle del Obispo, ¿de cuál se encuentra más orgulloso?
-Serían dos: el primero que vendí nada más empezar y el Gordo de Navidad, por lo que significa para una administración.
¿Alguna vez le ha tocado la lotería y ha tenido la oportunidad de vivir esa suerte en primera persona?
-De momento, no, pero lo intento.
Con todo el turismo que suele registrar la capital jacetana, especialmente durante el invierno y el verano, ¿da rabia cuando sabe a ciencia cierta que el premio viaja fuera?
-Un poco sí, pero tienes asumido que es una ciudad de turismo y eso pasa. Doy fe.
¿Orgullo altoaragonés y/o cosmopolitismo planetario?
-Orgullo altoaragonés. Es algo que se lleva dentro.
¿A quién le haría usted sin dudarlo la reverencia?
-Hay una persona que admiro y es Vicente Ferrer. Su fundación es especial.
¿La hipocresía cotiza al alza o a la baja?
-Al alza. A los tiempos que corren me remito. No hace falta mirar atrás.
A palabras necias, ¿oídos sordos, la otra mejilla o mamporro -dialéctico-?
-(Risas) Si se puede, mamporro.
Dígame con quién se junta y le diré quién es. ¿Hace un casting para seleccionar a sus amistades?
-No. Solo espero que sean buenas personas principalmente.
En lo que se refiere al deporte, ¿practica o admira?
-Practico, en la medida del tiempo del que dispongo.
¿Por quién doblan las campanas? (Un recuerdo en positivo).
-Muy especialmente por las personas que quieres y que ya no están.
A nivel personal y profesional, ¿es de los que piensa que lo mejor en la vida todavía está por llegar?
-Soy optimista y creo que sí.