Cuarenta años de Canfranc a Zaragoza con la bici a cuestas

Al Canfranero, a punto de cumplir la friolera de 140 años, le quedan muchas historias por contar. El longevo tren y el grupo de la Bajada Ciclista Canfranc-Zaragoza están unidos desde hace cuatro décadas. 40 años marcados por dos reivindicaciones: poder montar las bicis en el convoy y conseguir una línea internacional del siglo XXI hasta Francia en la que se pueda compatibilizar el transporte de mercancías con usos turísticos.

Este fin de semana cumplieron con la tradición realizando el recorrido de Zaragoza a Canfranc en dos etapas, haciendo noche en Ayerbe. Los primeros cinco se escaparon este viernes, el grueso del pelotón, con 20 participantes más, llegó al día siguiente y fueron recibidos por el alcalde de la localidad de la Jacetania, Fernando Sánchez. La lectura de un pequeño manifiesto y una exposición de fotografías que aúnan los 40 años de la marcha completaron la jornada.

Bajada Ciclista

Desde su estreno en 1982, la Bajada ciclista ha contado con más de 200 participantes llegados de todas las regiones de España y, a pesar de que cuando empezaron tenían 25 años, ahora que ha pasado el tiempo, “las ganas siguen intactas”, valora Julián Nieto, miembro del grupo.

“Ha sido siempre nuestro medio de transporte. Asistimos hace unos años al declive de la línea pero, en los últimos tiempos, parece que sopla un viento de esperanza”, añade el aragonés. A su vez lamenta que sean los únicos que luchan por esto, porque “aquí no hay partidos políticos”, asiente, sino una petición para que el tren sea por y para el pueblo.