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GANADERÍA

Bailo aprueba una moratoria de un año contra las macrogranjas

El Consistorio destaca “el rechazo vecinal” al proyecto de una explotación con 7.000 cerdos en Larués

Bailo forma parte del Paisaje Protegido de San Juan de la Peña y Monte Oroel.
Bailo forma parte del Paisaje Protegido de San Juan de la Peña y Monte Oroel.
S.E.

El pleno del Ayuntamiento de Bailo del pasado viernes aprobó la suspensión del otorgamiento de licencias para nuevas instalaciones agrarias intensivas, en la totalidad del suelo no urbanizable del municipio, durante un año, con la finalidad de abrir un debate sobre la incidencia de estos proyectos y estudiar la posible modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

La moratoria aprobada por el ente municipal viene a sumarse al rechazo a la iniciativa presentada para poner en marcha una macrogranja con más de 7.000 cerdos en el núcleo rural de Larués, lo que generó una serie de protestas vecinales, con el apoyo de la plataforma Stop Purines/Pueblos Vivos.

Para el alcalde de Bailo, Martín Torres, “hay que tener en cuenta el rechazo vecinal a las macrogranjas que existe dentro del término municipal”. Del mismo modo, considera que “debe existir un escenario de mayor control sobre estas actividades, tanto desde instancias superiores, como desde el municipio, debido a los problemas que pueden causar” sobre la salud y el medio ambiente.

En este sentido, el Ayuntamiento de Bailo recuerda que el municipio forma parte del Paisaje Protegido de San Juan de la Peña y Monte Oroel y cuenta con varios espacios declarados ZEPA (Zona de Especial Protección de las Aves) y LIC (Lugar de Interés Comunitario). Por todo ello, “es un entorno de especial protección ambiental, que debería ser tenido en cuenta por cualquier nueva instalación que se realice en el municipio y que afecte a este tipo de protecciones”.

Desde el Ayuntamiento de Bailo aseguran “haber sido pioneros en el establecimiento de las medidas que regulasen las granjas de porcino” y agregan que su PGOU “fue utilizado como ejemplo en otros municipios de la provincia de Huesca”. El citado Plan se aprobó en 2017, si bien “el sector del porcino ha evolucionado considerablemente”, por lo que “se considera necesario volver a estudiar el PGOU y realizar una nueva valoración del modelo productivo que se quiere en el municipio”.