Monegros

COSAS DE CASA

Josephine Monter llena Sena de ‘Seres de luz’

La artista exhibe esta muestra que se pueden ver los sábados y domingos en la Galería y Taller de Arte

Josephine Monter junto a algunas de sus obras.
Josephine Monter junto a algunas de sus obras.
M.B.

La Galería y Taller de Arte de Josephine Monter se inauguraba en 2018 con la exposición Rostros, basada en retratos de los vecinos y vecinas senenses, en 2019, expuso una gran colección de creaciones propias basadas en la mitología de los mayas y en inspiraciones inimaginables, a la par que sorprendentes, “las máscaras tienen la magia de transformar lo que representan”, explica la artista, que a través de esta muestra exhibía su pasión por capturar la belleza y el espíritu en todo lo que realiza.

Durante estos años en que el arte, como el mundo, ha estado paralizado por la pandemia, Monter ha organizado la exposición Seres de Luz que abría al público el pasado 17 de abril, donde esta apasionada por la mitología muestra unos seres fruto de sus sueños y de sus vivencias en Manitou, “donde viví una larga temporada y donde descubrí la etapa de reflexión y calma con mis Seres de Luz y la serie Misterios de la tierra”, señala subrayando “estos seres trasmiten, están llenos de sensaciones, de luz y de fuerza”.

La artista nació en Sena. Su formación en Bellas Artes transcurrió en Zaragoza, Barcelona, Siena (Italia) y Estados Unidos, en concreto en Nueva York, donde llegó para estar unos meses y se quedó 38 años de los que 23 fue profesora de la School of Visual Arts y, al mismo tiempo, desarrolló su arte en disciplinas como la pintura, la escultura o las artes escénicas, de ahí su colaboración en diferentes obras de teatro. Pero Josephine desarrolló su arte y su vida junto a otro artista, el escultor Miguel Ferreiro Paz, que falleció demasiado pronto, “él se tuvo que ir y fue cuando descubrí a estos Seres de Luz, que me dieron seguridad y tranquilidad, y tuve que pintarlos”. La pareja construyó su vivienda y galería de arte en Manitou, al suroeste de Philipstown en el condado de Putnam, Nueva York. “Allí tenían una profecía sobre el Búfalo Blanco”, narra la artista demostrando que eso que soñar siempre ha jugado un papel tan valioso como fuente de inspiración creativa, así como el poder de extender las mentes, seguir las curiosidades más profundas donde quiera que nos lleven y explorar posibilidades más allá de los límites de la realidad despierta. “El nacimiento de un búfalo blanco es para los indígenas de los Estados Unidos una gran alegría. Ellos están seguros que representa el inmenso amor de Dios por todos ellos. Y que haciendo de su religión una forma de vida, siguiendo y practicando sus creencias con gran devoción, es lo que hace posible que ellos se unan a Dios y a todo lo creado por Él, y Dios esté presente todos los días en sus vidas”, explica.

Y a Josephine Monter se le apareció un búfalo blanco, “una noche tuve un sueño, estaba mirando la entrada de mi estudio de Manitou, cuando el búfalo blanco surgió comiendo hierba, él me miró y continuo comiendo hierba, eso me impacto y al despertar empecé a pintar búfalos blancos”, dice la artista que ha creado varios cuadros dedicados al mundo animal y espiritual. Se trata de una manifestación que en lugar de la rareza, señala como “la alegría de los sueños como una forma de dar cuenta de las características más extrañas y reconocer sus valores potenciales. Cuando llevamos el sueño a la realidad podemos apreciar cómo los sueños más “extraños” pueden proporcionar enormes regalos de creatividad”.

Estos regalos incluyen hermosas imágenes, emociones, armonías mitológicas, ideas innovadoras, guía curativa, metamorfosis radicales y revelaciones existenciales, como hace esta pintora de sus increíbles cuadros con búfalos blancos o con unos Seres de Luz que son reales. El pasado 17 de abril muchas personas que visitaron la exposición estuvieron con una de ellos, con una mujer que cuando te abraza irradia luz, que se dedica a dar felicidad, entregar conocimientos, repartir alegría, que dialoga en vez de monologar, que comprende en vez de juzgar, una libre pensadora cuyo corazón no solo bombea sangre, porque su luz y la de su obra es amor.

Cabe destacar que Josephine es una enamorada de Los Monegros, de su paisaje y de sus gentes, y por ello, anima a visitar su Galería de Arte o el entorno de la localidad de Sena, cuya sierra invita al paseo, ya sea a pie o en bicicleta. Precisamente, dos de sus esculturas están en pleno monte, La Mora, que recuerda una antigua leyenda, y La tía Tonina, un personaje real, que murió en el año 1969 y que era muy querida en Sena. “Se trataba de una mujer campechana y luchadora, que subsistió sola tras perder a su marido y sus tres hijos, cultivando sus tierras y sin pedir ayuda a nadie. Era la tía de todos, siempre estaba dispuesta a ayudar y siempre te dedicaba amables palabras, especialmente a los niños”, concluye.

Los Seres de Luz, realizados desde 1994 a 2022, se pueden admirar los sábados y domingos, de 18:00 a 20:00 horas en la Galería y Taller de Arte de Sena (avenida de Sijena, 23). Para visitar otros días se puede llamar al teléfono 974 578 097.