Barasona continúa sin una lámina de agua estable

GRAUS.- En años de sequía como el actual, el embalse de Barasona sigue sin contar con una mínima lámina de agua estable que permita su aprovechamiento turístico en verano. Desde el camping Lago Barasona, Lorenzo Lasaosa, quien fuera presidente de la Asociación de Campings de Aragón, pionero y profundo conocedor del sector turístico, pide "un uso de las aguas más justo que satisfaga las necesidades de todos los colectivos".

Lasaosa apuesta por "equiparar" las reservas del embalse de Barasona, actualmente al 39 %, con la del resto de los pantanos que suministran el Canal de Aragón y Cataluña que, en ningún caso, bajan del 50 % de su capacidad y alcanzan incluso el 81,68%, en el caso de Escales. El sector turístico es un motor imprescindible para el desarrollo de Ribagorza, una zona débilmente poblada, donde recursos como el embalse de Barasona suponen un incentivo para atraer visitantes. Lasaosa considera que la importancia de esta infraestructura para luchar contra la despoblación es fundamental. "En la Baja Ribagorza existen unos pocos pueblos que intentan resistir la despoblación gracias a estar situados alrededor del embalse de Barasona. En ellos se ha desarrollado una actividad turística muy notable, que, junto con la industria cárnica que complementa gastronómicamente al turismo, sirven para mantener a muchas familias. Me refiero a dos cámpines en La Puebla de Castro, uno en Graus, otro en Benabarre y muchos alojamientos turísticos cerca del embalse", explica. A su juicio, es "un despropósito" el uso para riego de sus aguas en época estival sin considerar otras alternativas. "La utilización desmesurada de las aguas de este embalse para el riego en verano hace peligrar la actividad turística en la zona, y con ello la fijación de población".

Lasaosa recuerda que siempre ha habido unidad entre las administraciones y los colectivos de la zona sobre la necesidad de mantener esta lámina de agua hasta el final del verano y lamenta que no se haya tenido en cuenta si bien Barasona sigue siendo el más explotado para el riego de toda la cuenca. "Hemos reivindicado el mantenimiento de una lámina de agua mínima en agosto, que solo supondría equiparar las reservas del embalse de Barasona con las del resto de los embalses que suministran al Canal de Aragón y Cataluña, e incluso con el resto de la cuenca del Ebro, que a día de hoy (por este martes) 20 de agosto se encuentran al 57,6 % de su capacidad". Los datos de los embalses del río Noguera Ribagorzana en esa jornada tenían la siguiente situación: Canelles, 404,8 hectómetros cúbicos y un 58,8 % de su capacidad; Santa Ana, 120,5 hectómetros (50,8 %); Escales, 125,6 hectómetros (81,6 %); y Baserco, 14 hectómetros (64,4 %). Frente a ellos, Barasona, en el río Ésera, tiene 33,3 hectómetros cúbicos y un 39,3 % de su capacidad.

Lasaosa considera que esto se debe a doblar las cosechas y a abusar del embalse de Barasona, cuyas aguas no requieren bombeo, algo que no es tan gravoso y permitiría luchar contra esta situación de desigualdad frente al resto de pantanos. "Los motivos de este despropósito son permitir una segunda cosecha de maíz, y el segundo utilizar las aguas de Barasona -que no requieren bombeo- y no las de los embalses del Noguera Ribagorzana, que juntos disponen de cerca de 700 hectómetros cúbicos, frente a los 33 de Barasona". En su opinión, "tan solo con que Barasona tuviera 17 hectómetros cúbicos más, tendríamos la lámina de agua que venimos reivindicando".