Ribagorza

CARRETERAS

La N-260 reabre para el puente festivo entre el malestar por los sucesivos cierres

Los vecinos insisten en solicitar personal y no semáforos en los pasos alternativos ante flujos de subida y bajada desiguales

Tramo entre Congosto de Ventamillo y Campo.
Tramo entre Congosto de Ventamillo y Campo.
S. E.

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), tal como estaba previsto, reabrirá este viernes el tramo entre El Run y Campo, cerrado desde mediados de octubre por las obras de la carretera N-260 desde el Congosto de Ventamillo a Campo. El puente festivo suspende temporalmente -hasta el 12 de diciembre- este nuevo cierre que, con interrupciones también con fines turísticos, se prolongará hasta finales de enero. Mientras tanto, desde el Valle de Benasque manifiestan "el malestar" y "la preocupación" por estos cierres que dejan a los vecinos la mitad del año a una distancia de hasta 2 horas y media en coche de su hospital de referencia. De cara a la apertura inminente, insisten en solicitar personal y no semáforos en los pasos alternativos ante flujos de subida y bajada desiguales.

"Lo peligroso es que nos acostumbremos a esto porque no es normal que te cueste dos horas bajar al hospital y en esta situación estamos", lamenta el alcalde de Castejón de Sos, José Manuel Abad, quien asegura que aunque abran en festivos "nos afecta al turismo y al día a día". Después de tres años con el acceso principal al Valle de Benasque cerrado, asegura que los vecinos están "más que cansados". Sabemos de las dificultades de la carretera, que tienen que trabajar con seguridad y comodidad, pero a los que vivimos aquí nos afecta mucho. Desde Huesca, Zaragoza o Madrid lo pueden pensar, pero la realidad para el que vive aquí es muy complicada", asegura Abad desde Castejón, pensando que para los de Benasque llegar al Hospital de Barbastro ronda las dos horas y media. "Y lo que hemos pasado ya está, pero han hecho una ampliación de presupuesto para 2024", avanza ante la evidencia de que no se acabará en plazo.

El presidente de la Asociación Turística y Empresarial Valle de Benasque, José María Ciria, también trasladó el malestar. No se puede tener a un valle cerrado tanto tiempo y menos en invierno. No es solo por los turistas, es por una cuestión social, para el que tiene que hacerse una diálisis, trabajar. Un mes o mes y medio seguido debería ser tiempo suficiente. Hay mucho malestar. Que hagan lo que tengan que hacer y aprovechen a tope cuando cierran porque esto no puede ser".

La reapertura, que permitirá continuar desde Campo hacia el Valle de Benasque sin girar por la A-1605 ni la N-230, se realizará este viernes a las 13 horas y hasta las 0 horas del lunes 12 de diciembre. En ese momento, se volverá a cerrar hasta las 24 horas del jueves 22 diciembre cuando se reabra por Navidad para cerrarse de nuevo a las 0 horas del 16 de enero hasta las 13 horas del viernes 27 de ese mismo mes.

Personal para regular

De cara a la inminente apertura, la regulación del paso alternativo para ambos sentidos es otra de las preocupaciones del territorio porque el flujo de subida y bajada no es simétrico y no se puede regir por semáforos. "Si hay semáforos y los que suban han de parar tres veces, no habremos adelantado nada", lamenta el alcalde de Castejón, coincidiendo con Ciria. "Que se ponga personal y no semáforos. Cuando la tengan abierta que pongan gente, que no va sincronizado y hay que adecuar los pasos a la afluencia de subida y bajada", apuntó.

El presupuesto vigente de las actuaciones en marcha supera los 68 millones de euros. Las obras consisten en la ampliación de la plataforma de la carretera N-260 desde los 5,5 metros actuales hasta los 8 metros, minimizando la ocupación y el impacto en las zonas más conflictivas que discurren junto al río Ésera mediante la construcción de voladizos apoyados y anclados a la roca. De esta manera se facilitará el cruce de dos vehículos pesados o autobuses. Además, el proyecto incluye la ejecución de dos túneles de 265 metros y 540 metros de longitud respectivamente.