Ribagorza

CARRETERAS

La afección por el desprendimiento de Santorens se prolongará "varias semanas"

Una máquina trabaja en el lugar en el que se produjo el derrumbe.
Una máquina trabaja en el lugar en el que se produjo el derrumbe.
Elena Fortuño

El desprendimiento de grandes proporciones registrado hace una semana en la N-230, en Santoréns (Sopeira), a poco más de un kilómetro de donde se ha registrado el accidente mortal este martes, sigue obligando a dar paso alternativo en ese punto. Desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), se mostraron prudentes sobre la reapertura total y estimaron que "la afectación continuará por varias semanas", aunque manifestaron su predisposición a abrir en ambos sentidos los fines de semana, siempre que la obra lo permita y como ya se hizo el pasado viernes y hasta el lunes.

Los técnicos del Mitma estudian "con detalle" el alcance de las incidencias producidas por el desprendimiento registrado hace ocho días, el martes 13 de diciembre, en la N-230, entre los puntos kilométricos 114,5 115 y no se aventuran a dar una previsión de apertura. "Todavía es pronto para dar una fecha concreta. No obstante, podemos adelantar en una primera estimación que la afectación continuará por varias semanas", apuntaron.

Como ya hicieron entre el viernes pasado y primera hora de este lunes, se intentará, agregan, "en la medida que lo permitan las obras", reducir la afectación al tráfico durante los sábados y domingos. "Tenemos la voluntad de reducir lo máximo posible la afectación los fines de semana (levantar el paso alternativo), pero estamos condicionados por las características de la obra".

Cabe recordar que las dimensiones del desprendimiento, de tierra y rocas de gran tamaño, bloqueó completamente el paso desde la madrugada de ese martes y hasta primera hora de la tarde. Tras la reapertura parcial, se está dando paso alternativo mientras se prosigue con las labores de limpieza y acondicionamiento en la zona.