Sobrarbe

#CONTRALADESPOBLACIÓN

El colegio de Paúles de Sarsa evita su cierre con un aula para niños de dos años

El próximo curso acogerá a dos escolares, que permitirán la continuidad del centro

La concejala de Educación, la directora provincial y el alcalde de la localidad durante su visita al centro
La concejala de Educación, la directora provincial y el alcalde de la localidad durante su visita al centro
S. E.

El municipio de Aínsa-Sobrarbe y en concreto Paúles de Sarsa y sus alrededores están de enhorabuena. El colegio público ubicado en esta localidad logra sortear nuevamente su cierre con una adaptación que permitirá, el próximo curso, acoger a dos escolares de educación infantil. La Directora Provincial de Educación, Cultura y Deporte Olga Alastruey ha visitado las instalaciones para estudiar las necesidades de equipamiento y plantilla que el centro requiere para afrontar su nueva etapa.

Según han explicado fuentes municipales, la supervivencia del colegio volvía a estar en entredicho con la marcha al instituto de Aínsa, el próximo mes de septiembre, de tres de sus seis alumnos. Según el alcalde de Aínsa-Sobrarbe, Enrique Pueyo, “que el colegio permanezca abierto es fundamental para combatir la despoblación. Es una noticia importante y esperamos que poco a poco se vayan incorporando más niños”. El alcalde agradece, por otro lado, el esfuerzo del gobierno autonómico, ya que será necesaria una inversión que acondicione las aulas y el patio de recreo e incorporar un técnico de educación infantil.

Alumnos de Las Paúles a su salida del centro.
Alumnos de Las Paúles a su salida del centro.
S. E.

Por su parte, Alastruey comentaba durante su visita las ventajas de abrir este aula. Anticipar la escolarización y facilitar la conciliación sin tener que moverse a otras localidades han sido las principales motivaciones para desarrollar este proyecto, y concluía que “una escuela abierta es un pueblo vivo, un pueblo con futuro, que le da un servicio a los habitantes de la zona”.

Milagros Solanilla, vecina de Paúles de Sarsa, representa a una de las familias que se verá beneficiada el próximo curso. “Yo ahora llevo a la cría a la escuela infantil de Aínsa, con el madrugón y las molestias que supone. Será bueno para todos, también para ella, y para Paúles es una alegría oír a los críos cuando hacen gimnasia y cuando corren... le dan vida”. Milagros no esconde su alegría por la noticia y reconoce el papel que el ayuntamiento ha desempeñado apostando por el centro y por el Biello Sobrarbe.

El colegio, tal y como se conoce en la actualidad, mantiene sus puertas abiertas desde el año 1969. Son trece núcleos, concretamente del municipio de Bárcabo y de la zona sur de Aínsa-Sobrarbe, los que han podido contar con él incluso en los difíciles años de emigración a las ciudades. Recuerda Jose María Santos, ahora ex-director del colegio tras veinte años de trabajo, que fue a finales de la primera década de los 2000 cuando llegaron familias europeas que le dieron un soplo de aliento, superando entonces la docena de matrículas.

Jose María Santos ha vivido ese ir y venir de jóvenes bajo la amenaza permanente del cierre. Tiene claro que el haber contado con el mismo personal a lo largo del tiempo ha jugado un papel sustancial: “eso es lo que aporta estabilidad y perspectiva al proyecto educativo. Conoces a las familias y a los niños y creas un ambiente de confianza esencial para garantizar su continuidad”.

Santos acaba de pasarle el relevo a la nueva directora, Patricia Laín. Asegura que asentar población pasa inexcusablemente por contar con un centro educativo en la zona, algo que de momento está garantizado, pero que no será suficiente si el acceso a la vivienda sigue siendo tan complicado. El consistorio, que comparte la reflexión y afronta el reto buscando soluciones, se muestra optimista y confía en que las oportunidades y los servicios que también brinda la zona sur del municipio faciliten el camino.